El descanso que nos ofrece Jesucristo no es de inactividad de nuestra parte.
El descanso que nos ofrece se refiere a la tranquilidad que él nos da para que podamos luchar por lo que queremos no importa las situaciones difíciles que estemos pasando.
Muchas personas ya son cristianas pero igual se sienten cansadas y agobiadas sin saber qué hacer. Si tú llevas un bulto en tus hombros y alguien te dice que te subas a su camioneta para llevarte, de nada te sirve ir en ese vehículo si no bajas el bulto de tus hombros. Aunque llegas más rápido igual llegaras cansado.
Esto mismo ocurre con muchos cristianos que ya tienen a Cristo en su corazón pero no han dejado de luchar en sus fuerzas, no han podido entrar en el descanso que promete Jehová. Éxodo 33: 14 “Y él dijo: Mi presencia irá contigo, y te daré descanso.”
Como descansar en Jesucristo.
1. Debemos estar despiertos de manera espiritual. V 1 “Volvió el ángel que hablaba conmigo, y me despertó, como un hombre que es despertado de su sueño.” cuando nuestro espíritu está despierto podemos entender lo que Jesucristo quiere decirnos y lo que él quiere hacer con nosotros.
2. Debemos creer en lo sobrenatural. V 6 “Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos.” Dios nos da dones y habilidades para mejorar lo que tenemos que hacer. Pero a pesar de nuestra capacidad humana muchos propósitos que nos hemos planteado no los hemos podido alcanzar.
Es Dios quien nos abre puertas de oportunidades. Puertas que por nuestros méritos nunca lo hubiéramos logrado. Hay personas que no tienen ninguna preparación y por la gracia de Dios hoy tienen muy buenos empleos. Hay otros muy bien preparados pero a pesar de todos sus estudios hoy están desempleados.
3. No temas a los obstáculos. V 7 “¿Quién eres tú, oh gran monte? Delante de Zorobabel serás reducido a llanura; él sacará la primera piedra con aclamaciones de: Gracia, gracia a ella.” no importa si tu problema es tan grande como un monte Jehová lo reducirá a llanura. Hay un adagio que cada vez suena a frase de cajón por la incredulidad de muchos. Pero que con fe esas palabras pueden ser realidad: “no le digas a Dios cuán grande es tu problema. Dile a ese problema cuán grande es tu Dios”
4. Cree que si Dios te permitió comenzar un proyecto él te ayudara a terminarlo. V 9 “Las manos de Zorobabel echarán el cimiento de esta casa, y sus manos la acabarán; y conocerás que Jehová de los ejércitos me envió a vosotros.” Jesucristo nunca te dejara avergonzado.
Es necesario que los que hemos creído en Jesucristo nos acostumbremos a lo sobrenatural. Esa es la promesa de Dios. Jeremías 33: 3 “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.” Jesucristo nos promete que con el veremos cosas que jamás hemos visto. 1 Corintios 2: 9 “Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.”
La falta de Fe. Es un obstáculo muy grande que nos impide ver o sentir lo sobrenatural, para experimentar lo sobrenatural es necesario creerlo firmemente en nuestro corazón. Marcos 9: 23 “Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.”
No tengas miedo de lo que no entiendes deja de luchar en tus fuerzas deja que el Espíritu de Dios actué y todo será posible. La duda o el miedo son impedimentos para ver grandes cosas de parte de Dios.