En la antigüedad las multitudes seguían a Jesucristo, han pasado miles de años y todavía multitud de personas lo siguen. V 36 “Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas” podríamos decir que esto es maravilloso, el problema es que muchos de quienes lo siguen lo hacen tan solo motivados por recibir un milagro.
Todos necesitamos de un milagro el problema es cuando el milagro se convierte en nuestra única motivación.
Cuando alguien busca a Jesucristo tan solo por el interés de un milagro tiende a vivir desanimado cuando considera que Cristo no le responde a sus peticiones.
Jesucristo en ningún momento nos promete quitarnos los problemas, es más él nos dice que mientras estemos en este mundo es normal que tengamos aflicciones. Juan 16: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”
El problema está en el concepto errado que tenemos de la paz. Muchos creen que paz es total quietud y estar libres de todo problema.
Para Jesucristo la verdadera paz es tener la capacidad de poder resolver problemas sin llegar a la desesperación. Isaías 7: 4 ”y dile: Guarda, y repósate; no temas, ni se turbe tu corazón a causa de estos dos cabos de tizón que humean, por el ardor de la ira de Rezín y de Siria, y del hijo de Remalías” ver a otros triunfar mientras nosotros tenemos problemas hace que nos desesperemos con más facilidad.
Como es la paz de Cristo.
1. Es conservar la tranquilidad en nuestro corazón a si las cosas que estamos viviendo parezcan perdidas. Marcos 4: 37-38 “Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba. 38 Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?”
· 1.1. La Paz que nos da Jesucristo es incomprensible para nosotros los hombres. Filipenses 4: 7 “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús” la Paz de Jesucristo no es para entenderla solo es para Vivirla y disfrutarla.
· El mejor pintor del mundo te puede dibujar una manzana pero nunca te podrá dibujar el sabor de una manzana eso es algo que lo tienes que probar.
2. Es saber que después del Problema viene la recompensa. V 39 “Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza” para las personas de éxito los problemas no son más que oportunidades para corregir y mejorar. Para las personas de fracaso los problemas son obstáculos que les impiden avanzar.
· 2.1. Cuando el mar estaba enfurecido los peses quedaron desorientados, por esta razón pescarlos resultaba totalmente fácil por eso se hizo una gran bonanza. De ahí la frase célebre de los pescadores: “en rio revuelto ganancia de pescadores”
3. Es Saber que Jesucristo no promete quitarnos los problemas, pero si promete estar con nosotros para ayudarnos a resolverlos. Isaías 43: 2 “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti”
· 3.1. La verdadera paz de Jesucristo radica en su acompañamiento, su presencia en nosotros es lo que genera paz verdadera.
4. Es estar Seguros que saldremos victoriosos porque es Jehová quien nos entrena para enfrentar los Problemas. Salmos 144: 1 “Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra”
· 4.1. Jesucristo no quiere prepararnos un mundo especial para nosotros, Jesucristo quiere prepararnos a nosotros para enfrentar al mundo.
5. Es poder vivir bien en cualquier situación que estemos pasando. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.”
· 5.1. Esto no significa que debemos ser resignados, esto significa que debemos disfrutar lo que tenemos mientras luchamos por conseguir algo mejor.
En las cosas materiales podremos tener algo de tranquilidad pero la verdadera paz solo la da Jesucristo, él nos enseña a vivir bien en cualquier situación que estemos pasando.
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