Todos los seres humanos deseamos triunfar, nunca nos gustaría fracasar en lo que hacemos.
Pero la verdad es que constantemente cometemos errores que nos llevan a fracasar por mucho que anhelamos triunfar.
Jesucristo a través de la revelación dada a juan quiere enseñarnos a cómo evitar caer en el fracaso no haciendo algunas cosas que varias iglesias estaban haciendo.
Que cosas no debemos hacer y qué cosas si debemos hacer para evitar el fracaso.
Como Evitar el Fracaso.
1. Mantén siempre la pasión en lo que haces. Si no hay pasión en lo que se hace no importa cuán bien se haga el trabajo siempre será un fracasado. V 1- 4 “Escribe al ángel de la iglesia en Éfeso: El que tiene las siete estrellas en su diestra, el que anda en medio de los siete candeleros de oro, dice esto: Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado mentirosos; y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado. Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.”
Resultados de la Pasión.
1.1.Se supera cualquier obstáculo. Filipenses 4: 13 “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.”
1.2.Se deleita en lo que hace por lo tanto todo le queda Bien.
1.3.Es capaz de dar más de lo que le toca para Jesucristo quien hace tan solo lo que le toca es un inútil. Lucas 17: 10 “Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.”
Como recuperar la Pasión.
1. Recuerda quien eras. V 5 a “Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete,” el recordar el puesto en el que nos tenía Jesús hace que nos esforcemos por recuperar lo perdido.
2. Vuelve hacer lo que hacías antes. V 5 b “y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido” la actividad genera vida la inactividad física o espiritual genera enfermedad y muerte.
2. No menospreciarte, ni dejar que otros te menosprecien. V 9 “Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Satanás.” cuando te menosprecias te desanimas por lo tanto pierdes la fuerza del primer amor se te acaba la pasión. Satanás quiere gente desanimada sin ganas de seguir luchando.
3. No tengas Miedo a los Problemas. V 10 “No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.” el camino al éxito está lleno de obstáculos por esta razón son muy pocos los que logran alcanzar sus sueños. Los complejos y los prejuicios son los causantes del fracaso.
4. No Relacionándonos con Personas que solo piensan y actúan en maldad. V 13 - 14 “Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación.” Los malos deseos siempre terminan regresándose hacia las personas que los transmiten.
5. No consientas los malos comportamientos de los Demás. V 19-20 “Yo conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras postreras son más que las primeras. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que toleras que esa mujer Jezabel, que se dice profetisa, enseñe y seduzca a mis siervos a fornicar y a comer cosas sacrificadas a los ídolos.” El ser cómplice de la maldad de los demás termina contaminándonos.
El adagio popular dice dime con quién andas y te diré quien eres, los malos comportamientos de los demás terminan pegándose.
De nada sirve trabajar duro si no tenemos pasión, nos menospreciamos, le tenemos miedo a los obstáculos, deseamos mal a los demás o nos dejamos mal influenciar, para llegar a la cima del éxito se necesita mucho más que tan solo querer.
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