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Salmo 86. Relacionándonos con Dios.

 

El problema de muchos de nosotros los seres humanos es que tenemos problemas para relacionarnos con los Demás.

Podemos vivir años en un edificio o en un conjunto de apartamentos y no nos conocemos con quienes viven a nuestro alrededor.

Y lo que es más triste todavía, llevamos muchos años congregándonos en alguna iglesia y no conocemos a los demás hermanos, entramos y salimos sin saludar a nadie.

Jesucristo no solo quiere que nos congreguemos por necesidad de un milagro, por miedo a perder las bendiciones recibidas o por Costumbre.

Jesucristo quiere que tengamos con él una hermosa relación. Y como en toda Relación, que sintamos la necesidad de mantenernos en constante Comunicación con él.

Como Relacionarnos con Jesucristo.

1. Teniendo el deseo constante de que él nos Escuche. V 1 “Inclina, oh Jehová, tu oído, y escúchame, Porque estoy afligido y menesteroso.” Debemos hablarle no solo cuando estamos pasando por dificultades, también debemos comunicarle las cosas buenas que estamos viviendo.

·       1.1. Debemos hablarle para agradecerle por todas las maravillas que él hace en nuestra vida.

2. Expresándole siempre nuestra Confianza. V 2 “Guarda mi alma, porque soy piadoso; Salva tú, oh Dios mío, a tu siervo que en ti confía” confiar es mucho más que creer. Creer puede creer cualquiera, hasta los demonios creen. Santiago 2: 19 “Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan.

·       2.1. Confiar es entregarse de pleno sin condiciones a pesar de que las circunstancias parezcan en contra de todo lo que hacemos. La confianza nos lleva a estar tranquilos, sin ansiedad y angustia.

·       2.2. Cuando expresamos nuestra confianza a los demás estrechamos nuestra relación con ellos, la desconfianza hace que cualquier relación se deteriore.

3. Pidiendo Misericordia. V 3 “Ten misericordia de mí, oh Jehová; Porque a ti clamo todo el día” el problema de muchos de nosotros es que entre más confianza le tenemos a alguien menos lo respetamos. A Jesucristo muchas veces lo que hacemos es exigirle milagros en lugar de suplicarle.

·       3.1. A nuestra pareja y a las demás personas que conviven con nosotros debemos tratarlos con cultura y respeto, nada se pierde con decir, por favor, gracias. Etc. antes por lo contrario ganamos mucho.

4. Debemos disfrutar la presencia de las personas que hacen parte de nuestra Relación, en especial la presencia de Dios. V 4 “Alegra el alma de tu siervo, Porque a ti, oh Señor, levanto mi alma” no hay nada más triste saber que alguien está con nosotros solo porque le toca o por compromiso.

·       4.1. Uno no debe sentirse comprometido a amar a alguien solo porque un día hizo un juramento o un pacto, cumplir nuestros compromisos es importante pero el amor no debe ser por compromiso, debe disfrutárselo y para esto se necesita la intervención de todos los que componen la relación.

5. Debemos exteriorizar o expresar nuestros sentimientos de Amor. V 8,12 “Oh Señor, ninguno hay como tú entre los dioses, Ni obras que igualen tus obras. Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, Y glorificaré tu nombre para siempre.” a los seres humanos nos es más fácil expresar nuestros malos sentimientos que nuestros buenos sentimientos, nos es más fácil insultar que decir una frase de amor.

·       5.1. Jesucristo al igual que todas las personas que tenemos alguna relación quiere escuchar de nosotros que lo amamos o que lo queremos de todo Corazón.

·       5.2. Las personas a quienes amamos no solo deben imaginarse o suponer que las amamos, deben estar seguras de nuestros sentimientos a través de nuestro comportamiento con ellas.

No basta tan solo con congregase por costumbre o por necesidad, a Dios le agrada que nos congreguemos para expresarle todo nuestro amor. No es suficiente con que nuestra pareja crea que la amamos, es necesario expresárselo para enriquecer nuestra relación.