Dios a todos nos hizo con la capacidad de triunfar, pero la verdad es que no todos lo consiguen.
Son muchas
las razones por las cuales algunas personas no logran triunfar en la vida, pero
la razón principal por la cual no lo consiguen es la sobreprotección de sus
Padres.
El Rey
David fue uno de los guerreros más fuertes de ese tiempo, David era consiente
que él era un verdadero guerrero gracias a Jehová que lo entrenaba. V 1 “Bendito sea Jehová, mi
roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para la guerra”
Muchos de
nosotros confundimos protección con sobreprotección. La sobre protección
termina llevándonos a tener vidas de mediocridad.
Los psicólogos han descubierto que
los niños que no reciben la atención adecuada de sus padres pueden tener graves
problemas emocionales, pero estos niños pronto encuentran la forma de salir
adelante.
En cambio, los hijos de padres
sobreprotectores por lo general siempre terminan teniendo vidas de fracaso.
El problema de muchos padres es que
queremos prepararles a nuestros hijos un mundo especial para ellos, en lugar de
prepararlos a ellos para que puedan conquistar al mundo.
Como entrenar a un hijo como un Guerrero Triunfador.
1. Enseñándoles a Resolver sus
Problemas. Es necesario que ellos no sean dependientes de los demás, ellos
deben creer que todo lo pueden hacer con la ayuda de Jesucristo sin llegar a
creer que no necesitan de los demás. Filipenses 4: 13 “Todo lo puedo en
Cristo que me fortalece.”
· 1.1. Los padres solo
debemos prestarles acompañamiento en todas sus faenas, ellos deben saber que
deben contar con nosotros, pero ellos deben enfrentar sus batallas. Isaías 43:
2 “Cuando
pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán.
Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.”
2. Permitiéndoles Tomar decisiones.
La toma de decisiones es lo que afina nuestro carácter. Un padre que siempre
toma decisiones por sus hijos los convierte en mediocres. Deuteronomio 30: 15 “Mira, yo he puesto
delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal”
3. No Dándoles Todo. 2 Tesalonicenses 3: 10- 11 “Porque también cuando
estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar,
tampoco coma.”
los hijos que lo tienen todo y nada les cuesta no aprenden a valorar lo que
tienen y esto hace que lo derrochen generando pobreza cuando ya no tengan quien
los mantenga.
4. Involucrándolos en las actividades
de los padres. 2 Reyes 4: 4 -5 “Entra luego, y enciérrate tú y tus hijos; y echa en
todas las vasijas, y cuando una esté llena, ponla aparte. Y se fue la
mujer, y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos; y ellos le traían las
vasijas, y ella echaba del aceite.” si tus hijos no saben cómo es que manejas tus
negocios de nada sirve que luches por dejarles una jugosa herencia, si ellos no
saben qué hacer con ella más te demoras en morirte que ellos la malbaratan o la
derrochan.
5. Dejándoles que Asuman las
consecuencias de sus Errores. Deuteronomio 24: 16 “Los padres no morirán
por los hijos, ni los hijos por los padres; cada uno morirá por su pecado.” cada quien debe asumir
sus equivocaciones, cuando el padre paga el precio de las equivocaciones de sus
hijos ellos se convierten en irresponsables.
La mejor forma de proteger a nuestros
hijos es no sobreprotegiéndolos, no le vivas la vida a tus hijos deja que ellos
aprendan a caminar tomados de tu mano no cargados en tu espalda.