El pueblo de Israel estaba sometido en babilonia y tenía que salir de ese lugar para no ser destruido juntamente con babilonia. Babilonia simboliza a la religión falsa y muchos podríamos decir yo ya Salí de babilonia, pero el problema de hoy en día es que babilonia a través de sus tradiciones y costumbres se ha metido a la iglesia cristiana de manera tan sutil que muchos no se han dado cuenta.
El fin de babilonia había llegado y todos
sabemos que le esperaba la destrucción. V 1-3 “Así ha dicho Jehová: He aquí que yo levanto un viento destruidor
contra Babilonia, y contra sus moradores que se levantan contra mí. Y enviaré a
Babilonia aventadores que la avienten, y vaciarán su tierra; porque se pondrán
contra ella de todas partes en el día del mal. Diré al flechero que entesa su
arco, y al que se enorgullece de su coraza: No perdonéis a sus jóvenes,
destruid todo su ejército.”
Babilonia simboliza el sistema religioso
falso. Lo preocupante no es que babilonia sea destruido lo preocupante es que
en medio de babilonia estaba el pueblo de Dios.
Dos cosas importantes tenían que hacer el
pueblo de Dios para no ser destruido juntamente con babilonia.
1. Salir de babilonia. Renunciar a las falsas
prácticas cristianas. V 45 “Salid de en medio de ella, pueblo mío, y salvad cada uno su vida
del ardor de la ira de Jehová.” cada vez crecen más y más iglesias
cristianas esto debería ser un motivo de alegría. Pero lo preocupante es cada
día esas iglesias que nacen se contaminan de babilonia.
Muchas de las iglesias cristianas en su afán
de crecer han introducido a su interior todas las costumbres del mundo y de la
falsa religión.
Muchos pastores por el afán de llenar sus
establecimientos de manera descarada invitan a la gente a pertenecer a sus
iglesias prometiéndoles que no tienen que hacer ningún cambio. Que
tranquilamente pueden seguir con sus antiguas costumbres.
La verdad es que algunos pastores predican
porque sienten el anhelo de ganar almas para Cristo, pero otros solo los motiva
la ambición y sus deseos personales. Filipenses 1: 15 “Algunos, a la verdad, predican a Cristo por
envidia y contienda; pero otros de buena voluntad.”
2. No tener miedo. El miedo impide que se
piense con claridad. V 46 “Y no desmaye vuestro corazón, ni temáis a causa
del rumor que se oirá por la tierra; en un año vendrá el rumor, y después en
otro año rumor, y habrá violencia en la tierra, dominador contra dominador” muchas personas se contagian con babilonia por
el miedo a lo que sucede en el mundo. Jesucristo dice que en este mundo habrá aflicciones,
pero con el tendremos paz. Juan 16: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis
paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
No tengas miedo del ataque del mundo. V 51 “Estamos avergonzados, porque oímos la afrenta; la confusión cubrió
nuestros rostros, porque vinieron extranjeros contra los santuarios de la casa
de Jehová.” no importa cuán fuerte parezca
babilonia pronto sus tentáculos serán destruidos. V 53 “Aunque suba Babilonia hasta el cielo, y se
fortifique en las alturas, de mí vendrán a ella destruidores, dice Jehová.”
Pronto babilonia la gran ramera la que ha
contaminado a muchos reyes será destruida no te involucres con ella.
Apocalipsis 17: 1-2, 5 “Vino entonces uno de
los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven
acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada
sobre muchas aguas; con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los
moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación. Y en su
frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS
RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.”