En este mundo donde todo se ha vuelto competitivo la mayoría de los seres humanos lo único que quieren es lograr lo que se proponen a cualquier precio.
Lastimosamente
muchas familias han llegado a su deterioro total porque no han entendido que la
pareja es un complemento el uno del otro por eso cada uno es diferente.
Muchos
hombres confunden el sometimiento de la mujer con subyugarla y dominarla por eso
la maltratan y abusan de ella.
Aun las
guerras tienen sus protocolos y tratados que les garantiza no abusar de los
medios con los cuales quieren lograr su fin.
Para Jehová
no se justifica que para gobernar una nación se tenga que tomarla a la fuerza y
de manera sanguinaria. V 12 “¡Ay del que edifica la ciudad con sangre,
y del que funda una ciudad con iniquidad!”
Jehová
no comparte el dicho humano: en la guerra y en el amor todo se vale. Hay peleas
limpias y hay peleas sucias.
Pelea
limpia: cuando no estamos de acuerdo con algo refutamos con argumentos y de
buena manera. Hacemos uso del dialogo y la comprensión.
Pelea
sucia. Cuando aprovechando el enojo maltratamos, insultamos y aprovechamos el
momento para sacar toda la basura que puede haber en nuestro corazón.
La
palabra dice que de lo que hay en el corazón es lo que habla la boca. Lucas 6: 45 “El hombre bueno, del buen tesoro
de su corazón saca lo que es bueno; y el hombre malo, del
mal tesoro saca lo que es malo; porque de la abundancia del
corazón habla su boca.” es mentira cuando justificamos los insultos diciendo que fue asunto de la
calentura del momento.
Todas esas cosas que decimos en un momento de enojo ya
estaban acumuladas a través de los tiempos en nuestro corazón.
Como utilizar los medios
correctos para alcanzar nuestro Fin.
1. Entendiendo que todo lo que le hagamos a los demás ellos u
otros nos lo harán a nosotros. V 8 “Por cuanto tú has despojado a muchas naciones, todos los
otros pueblos te despojarán, a causa de la sangre de los hombres, y de los
robos de la tierra, de las ciudades y de todos los que habitan en ellas.”
·
1.1.A esto se le llama la ley de la siembra y la cosecha.
2. No abusando de nuestro poder o de nuestra condición para
sacar beneficio personal. V 9 “¡Ay
del que codicia injusta ganancia para su casa, para poner en alto su nido, para
escaparse del poder del mal!” aprovechar nuestra condición de superioridad para aprovecharnos de
quienes nos caen mal sería un acto de injustica.
·
2.1. Lo que nosotros hacemos a otras personas tarde o temprano otros
terminaran haciéndonos lo mismo a nosotros.
3. Haciéndole a los demás lo que nos gustaría que ellos nos
hagan. Mateo 7: 12 “Por
eso, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, así también haced vosotros
con ellos, porque esta es la ley y los profetas.” No hacer a otros lo que no nos gustaría que nos hagan puede
resultar fácil.
·
3.1. Con hacernos los indiferentes o ignorar a los demás y sobre todo a
quienes nos caen mal sería más que suficiente.
·
3.2. Pero tener que abrazar a quien no lo quiere hacer con nosotros o
tratar bien a quienes nos tratan mal es lo difícil.
El fin nunca justifica los medios, para lograr nuestros
propósitos y objetivos no necesitamos pasar por encima de los demás, con
cultura y humildad también podemos lograr muchas cosas.
