La diferencia entre una pequeña empresa y una gran empresa es que la gran empresa invierte en formar a su personal, de esta forma rinde más, hace las cosas a la perfección y no desperdicia tiempo en constantes correcciones. La pequeña empresa considera que formar a sus empleados es perder tiempo y dinero, por esta razón no hay la suficiente producción y lógicamente la calidad de trabajo no es la mejor.
La
formación no solo es importante a nivel financiero, la formación es de vital
importancia en la familia y lógicamente en la vida cristiana.
Podríamos
decir que Jesús acababa de vivir una experiencia desagradable con sus
discípulos él había resucitado y ellos no lo creían. V 12-14 “Pero después apareció
en otra forma a dos de ellos que iban de camino, yendo al campo. Ellos fueron y
lo hicieron saber a los otros; y ni aun a ellos creyeron. Finalmente se
apareció a los once mismos, estando ellos sentados a la mesa, y les reprochó su
incredulidad y dureza de corazón, porque no habían creído a los que le habían
visto resucitado.”
Pero lo más
impresionante de Jesús es que a pesar de lo que pasaba con sus discípulos les
delego lo más importante para él, la salvación es decir les encomendó lo más
serio y difícil llevar el evangelio hablar de Jesús resucitado a todo el mundo.
V 15 “Y les
dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.”
¿Tú le
confiarías algo tan delicado e importante a unas personas que parecen no creen
en ti? ¿Sabes porque Jesús lo hizo? Porque el mismo se encargaría de formarlos
a través de su santo espíritu. Hechos 1: 8 “pero recibiréis poder, cuando haya
venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en
toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”
La gran
falla en las iglesias en los hogares y hasta en algunas empresas es que han
perdido la capacidad de formar a su gente.
1.
Iglesias. Por el afán de crecer o de mantener a la gente contenta muchos
pastores no forman ni tampoco tienen la capacidad para hacerlo, por eso están
sedientos de que llegue gente con condiciones de liderazgo para ponerlos como
líderes y hasta en pastores, no importa en que crean o como los hayan formado.
Jesús no
llama gente importante la gente se hace importante cuando él los llama. Jesús
es un maestro y se toma su tiempo para formar. El espíritu santo les decía a
los discípulos que tenían que hablar. Marcos 13: 11 “Pero cuando os trajeren para
entregaros, no os preocupéis por lo que habéis de decir, ni lo penséis, sino lo
que os fuere dado en aquella hora, eso hablad; porque no sois vosotros los que
habláis, sino el Espíritu Santo.”
2. En el
Hogar. Los padres somos los llamados a formar el camino por el cual los hijos
han de transitar. Proverbios 22: 6 “Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere
viejo no se apartará de él.” en el colegio o en la universidad
les imparten conocimiento la formación se la adquiere en el hogar.
Como ser unos buenos padres formadores.
1. Los
Padres debemos saber exactamente qué es lo que queremos. Es difícil formar a
alguien cuando nosotros no sabemos qué hacer. Juan 6: 6 “Pero esto decía para
probarle; porque él sabía lo que había de hacer.”
2. Los
padres debemos estar seguros de quienes somos. Jesús sabía perfectamente quien
era. Juan 10: 30 “Yo y el Padre uno somos.”
3. Debemos
valorarnos. Hay muchos padres que se avergüenzan de lo que son. Su falta de
dinero o de estudio los atemoriza. 2 Corintios 12: 11 “Me he hecho un necio al gloriarme;
vosotros me obligasteis a ello, pues yo debía ser alabado por vosotros; porque
en nada he sido menos que aquellos grandes apóstoles, aunque nada soy.”
el Apóstol pablo no se sentía inferior a ninguno de sus compañeros apóstoles.
Pablo no se creía menos que otros, pero tampoco se creía mejor que otros.
4. Debemos
dedicar tiempo. El afán y la falta de paciencia hacen que muchos padres se
hagan a un lado de la formación de sus hijos.
5. Nunca
delegues la formación de tus hijos a otros. Con el dinero podrás contratar la
mejor niñera, pero esa niñera jamás podrá dar el amor que tu como padre puedes
dar a tus hijos. Tu empleada los podrá cuidar, pero solo tú los puedes formar.