Todos los seres humanos de una o de otra forma expresamos el amor que sentimos por los demás.
Pero solo Jehová de los ejércitos ha
expresado su amor por nosotros de una manera sin igual, él estuvo dispuesto a
entregar la vida de su propio hijo. Juan 3: 16 “Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no
se pierda, más tenga vida eterna.”
La diferencia entre Jehová y nosotros
es que la esencia de Jehová es el Amor. 1 Juan 4: 8 “El que no ama, no ha conocido a
Dios; porque Dios es amor.” Nuestra esencia no es el amor.
A partir de la desobediencia del
hombre nuestra esencia ya no es el amor, nuestra esencia es la rebelión, el egoísmo
y la maldad.
Por esta razón para nosotros los
seres humanos nos es más fácil odiar que amar, dañar que construir, dispersar
que unir.
La única forma que tenemos para
reflejar la presencia de Dios en nosotros es el amor. 1 Juan 4: 7 “Amados, amémonos unos
a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y
conoce a Dios.”
La principal manifestación del amor
es el dar, toda persona que ama está dispuesta a dar más que a pedir.
Como desarrollamos el arte de Dar.
1. La única
forma de dar es desarrollando en nosotros un alto sentimiento de generosidad. La generosidad es la virtud que nos
conduce a dar y darnos a los demás de
una manera habitual, firme y decidida, buscando su
bien y poniendo a su
servicio lo mejor de nosotros mismos, tanto bienes
materiales como
cualidades y talentos.
La solidaridad es una determinación firme y perseverante de
empeñarse por
el bien común; no es un sentimiento superficial
por los males de tantas
personas cercanas o lejanas, sino una actitud
definida y clara de
procurar el bien de todos y cada uno.
Razones para ser
generosos.
1. Las personas generosas Irradian buena energía. Las personas
generosas tienen la capacidad de atraer la prosperidad.
·
1.1. En los generosos se cumple la ley de la siembra, todo lo que
ellos siembran lo cosechan o lo atraen. Gálatas 6: 7 “No os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues
todo lo que el hombre siembre, eso también segará.”
2. Los generosos son doblemente felices. Hechos 20: 35 “En todo os mostré que así, trabajando, debéis
ayudar a los débiles, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: «Más
bienaventurado es dar que recibir».” Sentir la felicidad de quien recibe, llena el corazón del
generoso.
·
2.1. Los generosos por lo general no tienen tiempo para estarse
lamentando por sus sufrimientos, el calmar el sufrimiento ajeno alivia su
propio dolor.
La motivación del generoso es saber que lo que hace a otros
es lo que de ellos también recibirá. Mateo 7: 12 “Por eso, todo cuanto queráis que os hagan los
hombres, así también haced vosotros con ellos, porque esta es la ley y los
profetas.”
Lo que el generoso recibe de los demás no siempre es de
manera material, lo que recibe son bendiciones y expresiones de agradecimiento
que enriquece su vida personal y familiar.
Nunca dejes de ser generoso con los demás, la generosidad
tiene recompensa no solo de los humanos, la principal recompensa viene de
Jesucristo.