En este mundo solo hay dos tipos de personas, aquellas que triunfan y aquellas que van de fracaso en fracaso.
Ser un
triunfador es mucho más que un simple deseo, para ser triunfador se necesita,
esforzarse, dar lo mejor de nosotros y nunca doblegarnos ante las dificultades
propias de cada día.
Las
personas de fracaso miran en cada obstáculo una excusa o un pretexto para no
luchar, las personas de éxito miran en cada problema una oportunidad para
avanzar y mejorar.
Una persona
triunfadora siempre recuerda lo bueno que ha hecho o las victorias que ha
tenido en el transcurso de su vida. 12: 7 “Y estos son los reyes de la
tierra que derrotaron Josué y los hijos de Israel, a este lado del Jordán hacia
el occidente, desde Baal-gad en el llano del Líbano hasta el monte de Halac que
sube hacia Seir; y Josué dio la tierra en posesión a las tribus de Israel,
conforme a su distribución;”
Pero algo
aún más importante, una persona triunfadora siempre mira todo lo que a un le
falta por conquistar. 13: 1 - 2 “Siendo Josué ya viejo, entrado en años, Jehová le dijo: Tú eres ya
viejo, de edad avanzada, y queda aún mucha tierra por poseer. 13:2 Esta
es la tierra que queda: todos los territorios de los filisteos, y todos los de
los gesureos;”
Nunca te
resignes a lo que hasta ahora has logrado, siempre piensa que hay muchas otras
cosas por conseguir.
Ser una
persona triunfadora es poder llegar al máximo nivel de esfuerzo que podemos
lograr, en lo afectivo, en lo económico o en cualquier área en la que se
desenvuelva.
Los triunfadores, son personas que hacen las cosas muy
diferentes a los demás, para triunfar, se necesita ser diferente… muy
diferente.
Las personas promedio o las que son común y corriente, las
que nunca marcan diferencia siempre quieren conseguir el éxito, pero casi nunca
lo consiguen. Su vida entera se la pasan anhelando, soñando, pero nada sucede
de especial en ellos.
Como lograr ser una persona Triunfadora.
1. Creyendo
que es Dios quien hace todo por nosotros. 13: 6 a “todos los que habitan en
las montañas desde el Líbano hasta Misrefotmaim, todos los sidonios; yo los
exterminaré delante de los hijos de Israel” Que Jesucristo
haga todo por nosotros no significa que seamos inútiles.
·
1.1. Dios hace todo por nosotros en
el sentido que él nos prepara y nos da dones y talentos para que podamos
triunfar.
2.
Delegando actividades. 6 b “solamente repartirás tú por suerte el país a los israelitas por
heredad, como te he mandado.”
no pretendas hacerlo todo. El trabajar en equipo genera muchas más ganancias y
reduce en gran manera el esfuerzo. Eclesiastés 4: 9 “Mejores son dos que uno;
porque tienen mejor paga de su trabajo” El trabajar en equipo hace
que nos cuidemos de los unos a los otros. Eclesiastés 4: 10 “Porque si cayeren,
el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá
segundo que lo levante”
3. Dejándonos
entrenar. Salmo 144: 1 “Bendito
sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la batalla, Y mis dedos para
la guerra” solo las personas entrenadas pueden lograr lo que se
Proponen.
·
3.1. Las personas que viven en
fracaso son aquellas que quieren triunfar sin el menor esfuerzo, les gusta el
acomodamiento, todo lo quieren Gratis.
4. Entendiendo
que tan solo los que se esfuerzan y luchan pueden llegar a la cima de sus
sueños. 1 corintios 9: 24 “¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos
a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que
lo obtengáis.”
5. Actuando
y pensando como una persona triunfadora. Es necesario renovar nuestra mente.
Efesios 4: 23 “y renovaos en el espíritu de vuestra mente,” para actuar como vencedor es necesario pensar como
vencedor.
·
5.1. Nosotros somos producto y
resultado de lo que pensamos, si piensas que eres capaz lo lograras, si piensas
que no puedes nunca lo conseguirás.
·
5.2. De nada sirve actuar para
triunfar, si en nuestra mente hay pensamientos de fracaso.