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1 Samuel 21. Conserva tu Esencia.

 

Desde un principio Dios nos hizo para que viviéramos felices que nuestra manera de actuar sea agradable y correspondida por los demás.

Con el pecado y el pasar de los tiempos esa esencia se ha ido modificando tanto que cada uno de los seres humanos tenemos una manera diferente de ser, el problema no es que seamos diferentes, el problema es que en muchos la esencia se ha deformado, tanto que su forma de ser es insoportable.

Cuando llegamos a los pies de Cristo nuestra forma mala de ser es transformada y ahora somos nuevos.  2 Corintios 5: 27 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

David era un hombre con una esencia de guerrero, luchador y un vencedor. No le tenía miedo, a los leones a los osos o a los gigantes.

A pesar de que David era un gran hombre con muy buenas características, su esencia cambio y lógicamente su comportamiento también. V 13 “Y cambió su manera de comportarse delante de ellos, y se fingió loco entre ellos, y escribía en las portadas de las puertas, y dejaba correr la saliva por su barba” Cuantas veces hemos actuado de esa misma forma llevados por los problemas de cada día.

Que hace que nuestra esencia Cambie.

1. Involucrarnos con personas consideradas nuestras enemigas. V 10 “Y levantándose David aquel día, huyó de la presencia de Saúl, y se fue a Aquis rey de Gat.” La desesperación muchas veces no hace relacionar con personas que quieren nuestro mal.

2. Querer pasar desapercibido ante los demás. V 11 “Y los siervos de Aquis le dijeron: ¿No es éste David, el rey de la tierra? ¿No es éste de quien cantaban en las danzas, diciendo: 
Hirió Saúl a sus miles Y David a sus diez miles?
” todos los hijos de Dios somos blanco de todo mundo. Todos están pendientes de nuestro comportamiento.

3. No controlar nuestras Emociones. V 12 a “Y David puso en su corazón estas palabras,” nuestras emociones pueden hacernos tomar malas decisiones.

4. Perder el control sobre el miedo. V 12 b “y tuvo gran temor de Aquis rey de Gat.” Los hombres valientes no son los que no tienen miedo, los hombres valientes son aquellos que saben controlar sus miedos.

5. Llenarnos de Ansiedad. 1 Pedro 5: 7 “echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.” la ansiedad nos hace perder la paciencia y la falta de paciencia nos hace tomar malas decisiones

6. Tomar demasiadas cargas más de las que podemos soportar. Éxodo 18: 17- 18 “Entonces el suegro de Moisés le dijo: No está bien lo que haces. Desfallecerás del todo, tú, y también este pueblo que está contigo; porque el trabajo es demasiado pesado para ti; no podrás hacerlo tú solo.” El exceso de compromisos hace que no tengamos tiempo para nosotros y esto en ocasiones casa estrés.

7. Esperar Recompensa de parte de los Hombres. Colosenses 3: 23- 24 “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.” cuando hacemos las cosas esperando que el hombre nos reconozca por lo general nos decepcionamos y ya no queremos servir.

Dios quiere que vivamos felices y para eso nos ha llenado de su esencia. Dios es amor. No permitas que los problemas del mundo endurezcan tu corazón cambiando tu manera de ser.

No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño; sólo toma precauciones. Algunos persiguen la felicidad, otros la crean. Tenlo presente siempre. Que la conducta y las acciones de otras personas jamás condicionen las tuyas, nunca cambies tu esencia. Si una rosa cambia su esencia, deja ser una rosa. Si cambias tu esencia dejarías de ser tú