Quienes amamos a Jesucristo debemos considerar el templo donde nos reunimos como nuestro segundo hogar.
Es en el templo donde
experimentamos la presencia de Dios cuando le alabamos.
Es en el
templo cuando desciende la presencia de Dios, donde recibimos milagros y vemos
cosas sobrenaturales. 2 crónicas 20: 22
“Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra
los hijos de Amón, de Moab, y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos
que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros:”
Si el
templo es muy importante para la vida de nosotros los cristianos lógicamente no
es descabellado que seamos nosotros quienes ayudemos a su mantenimiento y
embellecimiento.
Como debemos cuidar el Templo.
1. Preocupándonos por su buena
presentación. V 5 “recíbanlo los sacerdotes, cada uno
de mano de sus familiares, y reparen los portillos del templo dondequiera que
se hallen grietas.” no puede estar sucio o
despintado. Los del mundo no irían a una discoteca de mala muerte para expresar
su alegría.
Los miembros de la iglesia deben
preocuparse de su cuidado. V 4 “Y Joás dijo a los
sacerdotes: Todo el dinero consagrado que se suele traer a la casa de Jehová,
el dinero del rescate de cada persona según está estipulado, y todo el dinero
que cada uno de su propia voluntad trae a la casa de Jehová,” la
iglesia de Cristo somos una familia por lo tanto todos nos debemos preocupar
por embellecer el templo.
3. Se debe actuar con Diligencia. V
6-7 “Pero en el año veintitrés del rey Joás aún no habían
reparado los sacerdotes las grietas del templo. Llamó entonces el rey Joás
al sumo sacerdote Joiada y a los sacerdotes, y les dijo: ¿Por qué no reparáis
las grietas del templo? Ahora, pues, no toméis más el dinero de vuestros
familiares, sino dadlo para reparar las grietas del templo.” Muchas
personas solo critican el mal estado de la iglesia pero no toman la iniciativa
para repararla.
4. Se debe ser Recursivos. V 9 “Mas el sumo sacerdote
Joiada tomó un arca e hizo en la tapa un agujero, y la puso junto al altar, a
la mano derecha así que se entra en el templo de Jehová; y los sacerdotes que
guardaban la puerta ponían allí todo el dinero que se traía a la casa de
Jehová.” las alcancías siempre han sido una muy buena opción para
reunir recursos que sirvan en un futuro en el área espiritual o en el área
secular.
5. No se puede ser tacaños para
embellecer el lugar donde mostramos nuestra alegría con Dios. V 11-12 “Y daban el dinero
suficiente a los que hacían la obra, y a los que tenían a su cargo la casa de
Jehová; y ellos lo gastaban en pagar a los carpinteros y maestros que reparaban
la casa de Jehová, y a los albañiles y canteros; y en comprar la madera y
piedra de cantería para reparar las grietas de la casa de Jehová, y en todo lo
que se gastaba en la casa para repararla.” no podemos tener buenos pulmones
para gritar reclamando nuestros milagros y ser sordos cuando hay que sembrar
económicamente para el buen funcionamiento del Templo.
6. Los Recursos no deben salir de
los diezmos u ofrendas para la expansión del reino. El arreglo de la casa de
Dios debe ser un privilegio aparte. V 13-14 “Mas de aquel dinero que se traía a
la casa de Jehová, no se hacían tazas de plata, ni despabiladeras, ni jofainas,
ni trompetas; ni ningún otro utensilio de oro ni de plata se hacía para el
templo de Jehová; porque lo daban a los que hacían la obra, y con él
reparaban la casa de Jehová.”
7. No se debe dar con Dolor. V 15 “Y no se tomaba cuenta
a los hombres en cuyas manos el dinero era entregado, para que ellos lo diesen
a los que hacían la obra; porque lo hacían ellos fielmente” esto no
quiere decir que se debe ser desorganizados, los sacerdotes manejaban ese
dinero de manera fiel.
En el templo hecho de ladrillos o
piedras no podemos contener la presencia de Dios, pero si podemos demostrarle
nuestro amor. Es en el templo donde podemos hacer que se desborde todo nuestro
deseo de adorar a Dios y eso hace que la presencia de Dios se manifieste.