Las personas de éxito son aquellas que tienen muy en claro que nadie puede ganar si no invierte.
La inversión es algo
parecido a la siembra y la cosecha, si no siembras no puedes cosechar.
Lastimosamente muchos cristianos no
entienden que esta ley financiera también se aplica en lo espiritual. Gálatas
6: 7 “No os engañéis; Dios no puede ser
burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.”
El bien también es algo que podemos
sembrar, si queremos que las demás personas nos paguen con bien, debemos
sembrar el Bien. V 9 “No nos
cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos.”
Como Invertir para Ganar.
1. Reconociendo y valorando el
trabajo de los Demas. V 1 “Después dijo el rey David a toda la asamblea: Solamente a
Salomón mi hijo ha elegido Dios; él es joven y tierno de edad, y la obra
grande; porque la casa no es para hombre, sino para Jehová Dios.” Las
personas que no valoran a los demás tampoco tienen reconocimiento de lo que
hacen.
2. Ayudando de manera Generosa. V 2
“Yo con todas mis
fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro, plata
para las cosas de plata, bronce para las de bronce, hierro para las de hierro,
y madera para las de madera; y piedras de ónice, piedras preciosas, piedras
negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, y
piedras de mármol en abundancia.” Sin egoísmos podemos luchar
fuertemente a si nosotros no nos llevemos el crédito de lo que se va hacer.
3. Dando Más de lo que Nos toca. V
3 “Además de esto, por
cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular
oro y plata que, además de todas las cosas que he preparado para la casa del
santuario, he dado para la casa de mi Dios:” las personas de éxito son
aquellas que no se limitan a dar o hacer tan solo lo que les toca. Las personas
que tan solo hacen lo que les toca son inútiles. Lucas 17: 10 “Así también vosotros,
cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles
somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.”
4. Siendo Ejemplo de lo que se debe
hacer para que otros también lo hagan. V 6 “Entonces los jefes de familia, y los príncipes de
las tribus de Israel, jefes de millares y de centenas, con los administradores
de la hacienda del rey, ofrecieron voluntariamente.” Las
personas de éxito son aquellas que han entendido que el egoísmo es como una
gran cadena de acero que nos impide avanzar y mejorar.
5. Creyendo que Todos podemos
Ayudar. V 8 “todo
el que tenía piedras preciosas las dio para el tesoro de la casa de Jehová, en
mano de Jehiel gersonita.” No importa nuestra condición si
nos disponemos podemos ser útiles en ayudar a conseguir grandes retos.
No te menosprecies tal vez no
tengas las mismas capacidades que los demás, pero si te propones en algo puedes
ayudar.
6. Ayudando con alegría y con todo
el corazón. V 9 “Y se alegró el pueblo por haber contribuido
voluntariamente; porque de todo corazón ofrecieron a Jehová voluntariamente.” El ayudar
con mucho o con poco a conseguir grandes retos debe ser motivo de alegría en
nuestro corazón.
7. Siendo Agradecidos con Dios y
con las Personas que Colaboran. V 10 “Asimismo se alegró mucho el rey David, y bendijo a
Jehová delante de toda la congregación; y dijo David: Bendito seas tú, oh
Jehová, Dios de Israel nuestro padre, desde el siglo y hasta el siglo.” todas las
personas que están a nuestro lado son importantes y claves en la consecución de
nuestras metas nunca las ignores.
8. Reconociendo que Todo es de
Dios. V 12 “Las
riquezas y la gloria proceden de ti, y tú dominas, sobre todo; en tu mano está
la fuerza y el poder, y en tu mano el hacer grande y el dar poder a todos” entender
que todo es de Jesucristo hace que no seamos mezquinos o tacaños y que demos
con Alegría. V 14 “Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que
pudiésemos ofrecer voluntariamente cosas semejantes? Pues todo es tuyo, y de lo
recibido de tu mano te damos.”