En muchas ocasiones llevados por las dificultades y problemas propios de este mundo nos sentimos secos y estériles.
Jesucristo de manera sobre natural puede hacer que volvamos florecer y a dar frutos, pero no siempre todo será de manera sobrenatural.
Jesucristo nos exige dar frutos. Mateo 7: 19 “Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego” Jesucristo es un Dios de excelencia por lo tanto también nos exige y no cualquier fruto él dice que debemos dar buen fruto.
Una regla que nos permite medir el liderazgo de una persona está en los frutos. Más que nuestras palabras son nuestros actos lo que nos debe identificar. V 20 “Así que, por sus frutos los conoceréis.”
Por lo tanto, es necesario que aprendamos a tener una vida productiva. Como podemos llegar a ser productivos.
1.Teniendo un Propósito que alcanzar. 1 Corintios 9: 26 “Por tanto, yo de esta manera corro, no como sin tener meta; de esta manera peleo, no como dando golpes al aire” De nada sirve trabajar duro si no se sabe que es lo que se quiere conseguir.
· 1.1. El Adagio popular dice: el que no sabe para dónde va cualquier bus le sirve, total está perdido.
2.No creyendo ya haberlo alcanzado Todo. Filipenses 3: 12 “No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús” quienes creen ya haberlo alcanzado todo se acomodan y se estancan.
· 2.1. La única forma de avanzar es creyendo que todavía hay un camino por recorrer.
3.Nunca Retrocediendo. Filipenses 3: 13 a “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás” el camino al éxito no es fácil solo llegan quienes no desisten.
· 3.1. Para las personas de éxito los problemas son oportunidades de corregir y de mejorar.
· 3.2. Las Personas de fracaso son aquellas que ven en los problemas obstáculos para avanzar.
4.Esforzandose por avanzar. Filipenses 3: 13 b “y extendiéndome a lo que está delante” las cosas importantes no son fáciles de conseguir.
· 4.1. El día en que las cosas importantes sean fáciles de conseguir automáticamente dejan de ser importantes ya que cualquiera las podría obtener.
5.Creyendo que somos Ejemplo para los demás. 1 Corintios 11: 1 “Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo.” saber esto nos obliga a cada día ser mejores.
6.Amando lo que se hace. Colosenses 3: 23 “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres” solo cuando amamos lo que hacemos lo disfrutamos y nos obligamos a cada día hacerlo mejor.
7.Siendo diligentes. Romanos 12: 11 “En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor” las personas diligentes no solo hacen las cosas bien, las hacen cuando se tienen que hacer y no cuando les conviene.
8.Haciendo más de lo que nos toca. Lucas 17: 10 “Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha ordenado, decid: «Siervos inútiles somos; hemos hecho solo lo que debíamos haber hecho».” Jesucristo es un Dios de Resultados, para el hacer tan solo lo justo es mediocridad.
La única forma de llegar a tener prosperidad es si somos productivos, no basta con soñar con grandes cosas, es necesario actuar o producir. El mundo de los fracasados está lleno de personas soñadoras con buenos planes pero que no hacen nada por hacerlos realidad.