Muchas personas cuando no tienen ningún cargo de importancia o son simplemente empleados son muy atentos, serviciales y hasta agradables.
Pero cuando
alcanzan cargos importantes o de jerarquía sufren una trasformación increíble se
vuelven, tiranos, excéntricos y humillativos, podríamos decir que el poder se le
subió a la cabeza.
Jesucristo
a todos nos ha dado dones y talentos para que podamos lograr cualquier cosa que
nos propongamos incluyendo el alcanzar cargos de jerarquía, el problema es cuando
el poder se nos sube a la cabeza. V 8 “Egipto como río se
ensancha, y las aguas se mueven como ríos, y dijo: Subiré, cubriré la tierra,
destruiré a la ciudad y a los que en ella moran” muchos
cristianos sufrimos de ese mal cuando triunfamos se nos olvida que fue
Jesucristo quien nos dio el poder para lograrlo. Deuteronomio 8: 17-18 “y digas en tu corazón:
Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza.
8:18 Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las
riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día.”
Cuando el poder se sube a la cabeza.
1. Nunca
tiene paz en su corazón. V 11 “Sube a Galaad, y toma bálsamo, virgen hija de
Egipto; por demás multiplicarás las medicinas; no hay curación para ti.”
Las personas tiranas siempre se sienten solas y vacías.
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2.Las personas que tienen el poder
en la cabeza siempre buscan ser reconocidos y cuando no lo logran se deprimen y
no logran la felicidad.
2. Causa
fracaso en sus dirigidos. V 12 “Las naciones oyeron tu afrenta, y tu clamor llenó
la tierra; porque valiente tropezó contra valiente, y cayeron ambos juntos.”
La tiranía y mal trato solo genera miedo y confusión.
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2.1. No importa cuán hábil sea una
persona, frente al maltrato no rinde lo que debería y lógicamente tampoco
disfruta lo que hace.
3. Tarde o
temprano lo que construye se destruye. V 15 “¿Por qué ha sido
derribada tu fortaleza? No pudo mantenerse firme, porque Jehová la empujó.”
El abuso de poder produce inconformidad.
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3.1. las personas que trabajan con alegría
rinden y hacen las cosas bien, esto hace que una institución funcione de manera
excelente.
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3.2. Las personas que trabajan bajo
maltrato tan solo hacen lo que les toca, no luchan por mejorar lo que hacen
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3.3. Las personas que se les sube
el poder a la cabeza causan su propia derrota. V 20 “Becerra hermosa es Egipto; mas viene destrucción,
del norte viene.”
Como evitar que el Poder se suba a nuestra cabeza.
1. Manteniendo
la humildad. Las personas humildes no se creen más que los demás, siempre mantienen
cordura cuando tienen que pensar sobre ellos mismos. Romanos 12: 3 “Porque en virtud de la gracia que me ha sido dada,
digo a cada uno de vosotros que no piense más alto de sí que lo que debe
pensar, sino que piense con buen juicio, según la medida de fe que Dios ha
distribuido a cada uno.”
2. Entendiendo
que todos no importa cuál sea nuestra posición somos unos Servidores. Marcos 9:
35 “Sentándose,
llamó a los doce y les dijo*: Si alguno desea ser el primero, será el último de
todos y el servidor de todos.”
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2.1. Quienes tienen cargos políticos:
alcaldes, gobernadores, concejales. Etc. Su nombre técnico es servidor Público.
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2.2. El problema es que muchos de
nuestros gobernantes regionales y nacionales se les ha olvidado que son
servidores, es decir a muchos el poder se le ha subido a la cabeza.
Si tu estas en
una posición de jerarquía, presidente de alguna junta administrativa en tu
trabajo, en tu barrio o eres jefe en tu empresa de trabajo que nunca se te
olvide que no estas para mandar el cargo es para servir y ser un facilitador,
solo de esta forma lograrás triunfar y hacer triunfar a la institución que
diriges al igual que a los que están bajo tu dirección.