La única forma de prosperar en esta vida es produciendo.
Para
poderlo lograr Jesucristo nos dio a todos dones y talentos aun las personas que
han perdido parte de sus miembros tales como piernas o brazos Dios les ha
dotado de otras habilidades para que también puedan seguir en ese camino a la
prosperidad.
En este
capítulo Jesucristo nos enseña sobre un hijo que es prodigo, prodigo significa
derrochador. El derroche es la base para llegar a la ruina.
Como podemos evitar la Ruina.
1. Evitar
la ambición. V 12 “y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes
que me corresponde; y les repartió los bienes.”
la ambición llevo a este joven a pedir la parte de su herencia. La ambición nos
lleva a pedir dineros que todavía no podemos Administrar.
2.
Administrando bien nuestros recursos. V 13 “No muchos días después, juntándolo
todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició
sus bienes viviendo perdidamente.”
la mala administración nos lleva a gastar más de lo que ganamos.
2.1.
No compres cosas que no necesitas.
2.2.
Has una Lista de gastos
2.3.
No vivas esclavo de las deudas ahorra para comprar de contado.
3. Provisionando
para los momentos difíciles. V 14 “Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran
hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle.”
todos tenemos momentos muy buenos en nuestra vida. Excelentes negocios, buenos
salarios o nos llega una herencia que no esperábamos el problema es que en esos
momentos buenos nos olvidamos que posiblemente también pueden llegar momentos
difíciles.
Jehová no
le evito a José que viviera siete años de escases le dio sabiduría para que
aprendiera a ahorrar en los momentos de prosperidad y de esta forma vivir bien
en los momentos difíciles o en los tiempos de vacas flacas. Génesis 41: 29-30 “He aquí vienen siete
años de gran abundancia en toda la tierra de Egipto. Y tras ellos seguirán
siete años de hambre; y toda la abundancia será olvidada en la tierra de
Egipto, y el hambre consumirá la tierra.”
4.
Reaccionando a tiempo. V 17 “Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi
padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!”
analiza por qué estás pasando esa situación. Que cosas estás haciendo mal o que
cosas has dejado de hacer.
5. Toma la
decisión de Actuar. V 18 “Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado
contra el cielo y contra ti.” no es suficiente con que te des
cuenta de cuál es tu error es necesario que des pasos de acción.
6. Siendo
humilde. V 21 “Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo
y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.” solo las
personas humildes son capaces de reconocer sus errores y corregir. Sin
corrección no hay perfección.
7. Dejando
el Egoísmo. V 28 “Entonces se enojó, y no quería entrar. Salió por tanto su padre, y le
rogaba que entrase.” el egoísmo es el principio de los fracasos y las
equivocaciones.
No
derroches lo que Dios te ha dado. Recuerda que no solo se puede derrochar
dinero también podemos derrochar el tiempo que Dios nos da. A todos Dios nos
dio 24 horas al día te has puesto a pensar en que inviertes esas horas, porque
si no las inviertes las estas derrochando.