La etiqueta y el protocolo implican normas de comportamiento establecidas para hacer la vida social más agradable, pero la diferencia se marca en que la etiqueta regula la conducta personal y el protocolo establece los criterios de trato y procedencia de una persona o institución.
La etiqueta
y protocolo es algo que siempre se lo ha tenido en cuenta para estar bien en
cualquier reunión que tengamos.
Muchos
cristianos creemos que debemos ser notados en las reuniones simplemente porque
nos invitan a orar.
Que en las
reuniones sociales nos inviten a orar es muy importante, pero para Jesucristo
también era muy importante nuestra manera de comportarnos.
Como
cristianos también debemos ser ejemplo de buena educación. V 7- 8 “Observando cómo
escogían los primeros asientos a la mesa, refirió a los convidados una
parábola, diciéndoles: Cuando fueres convidado por alguno a bodas, no te
sientes en el primer lugar, no sea que otro más distinguido que tú esté
convidado por él,” no creas que,
porque eres el líder, el pastor o el familiar más cercano del dueño de la
reunión tu eres el más importante.
Nuestra
cercanía con los dueños de la reunión social debe llevarnos y motivarnos a
servir, en lugar de exigir que nos sirvan.
Como debemos comportarnos en un evento social.
1. Manteniendo
la humildad. V 10 “Mas cuando fueres convidado, ve y siéntate en el último lugar, para que
cuando venga el que te convidó, te diga: Amigo, sube más arriba; entonces
tendrás gloria delante de los que se sientan contigo a la mesa.” Siempre debemos considerar que puede haber otros más
importantes que nosotros.
·
1.1. Esto no es sentirse menos que
los demás, esto es tener respeto por los demás.
2. No
creyéndonos más que los demás. V 11 “Porque cualquiera que se enaltece, será humillado;
y el que se humilla, será enaltecido.” Las personas que se creen más
que otros terminan siendo arrogantes y antisociales.
3. Nuestra
cortesía no debe estar condicionada por el interés. V 12 “Dijo también al que le
había convidado: Cuando hagas comida o cena, no llames a tus amigos, ni a tus hermanos,
ni a tus parientes, ni a vecinos ricos; no sea que ellos a su vez te vuelvan a
convidar, y seas recompensado.” Hacer
acepción de personas para ir a eventos o para escoger personas a nuestros
eventos nos hacen ver Arrogantes.
3. Nuestro comportamiento
debe ser igual con los que tienen y con los que no tienen riquezas materiales.
V 13 “Mas
cuando hagas banquete, llama a los pobres, los mancos, los cojos y los ciegos;”
una persona importante siempre ve a todos los demás como personas importantes.
·
3.1. Si vas a despreciar a los que
no tienen y los vas hacer sentir incomodos, mejor no los invites.
4. Nuestro
buen trato a los que no pueden devolvernos el favor es recompensado por Jesucristo.
V 14 “y
serás bienaventurado; porque ellos no te pueden recompensar, pero te será
recompensado en la resurrección de los justos.”
Creer esto hace que disfrutemos servir a todo el mundo por igual.
5. Reservando
tiempo para los demás. V 18- 20 “Y todos a una comenzaron a excusarse. El primero dijo: He
comprado una hacienda, y necesito ir a verla; te ruego que me excuses. Otro
dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes, y voy a probarlos; te ruego que me
excuses. Y otro dijo: Acabo de casarme, y por tanto no puedo ir.”
No permitas que el exceso de actividades te aleje de quienes amas.
De nuestro
comportamiento depende que los demás nos amen o nos odien, no desprecies a los demás
solo por no tener tu comodidad, recuerda no hay enemigo ni amigo pequeño, tarde
o temprano también necesitaras de los demás.