Hay personas y cosas que son útiles para el funcionamiento de algo.
De hecho, algunas
personas guardan cuanta cosa se encuentran porque consideran que en algún
momento les será útil o les servirá para algo.
Para el
pueblo de Israel los sacerdotes no solo eran útiles para el funcionamiento de
la iglesia.
En un
principio Dios había considerado que quienes lo tenían que servir serian todos
los primogénitos de toda familia. Números 8: 17 “Porque
mío es todo primogénito de entre los hijos de Israel, así de hombres como de animales;
desde el día que yo herí a todo primogénito en la tierra de Egipto, los
santifiqué para mí.”
Pero todos
los que tenían que servirle por obligación lo traicionaron. Éxodo 32: 1 “Viendo el pueblo que Moisés tardaba en descender del monte,
se acercaron entonces a Aarón, y le dijeron: Levántate, haznos dioses que vayan
delante de nosotros; porque a este Moisés, el varón que nos sacó de la tierra
de Egipto, no sabemos qué le haya acontecido”
Los únicos
que se mantuvieron fieles fueron los descendientes de Levi. Éxodo 32: 26 “se puso Moisés a la puerta del
campamento, y dijo: ¿Quién está por Jehová? Júntese conmigo. Y se juntaron con
él todos los hijos de Leví.”
Por esta
razón los primogénitos fueron remplazados por los levitas como los sacerdotes
que le servirían. Números 3: 40-41 “Y Jehová dijo a Moisés: Cuenta todos los primogénitos
varones de los hijos de Israel de un mes arriba, y cuéntalos por sus nombres. Y
tomarás a los levitas para mí en lugar de todos los primogénitos de los hijos
de Israel, y los animales de los levitas en lugar de todos los primogénitos de
los animales de los hijos de Israel. Yo Jehová”
Levi significa
el que une a los suyos, los levitas además de tener a su cargo la administración
del templo, para Jehová eran los que se encargarían de unir a su pueblo con él.
Jesucristo es
el sumo sacerdote, él es el puente entre Jehová y su pueblo, la humanidad
estaba alejada de Jehová, Jesús se encarga de unirlos.
Hoy los
sacerdotes o pastores tenemos la misión de reconciliar al hombre con Jehová. 2
corintios 5: 19 “que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al
mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a
nosotros la palabra de la reconciliación.”
La reconciliación
de la humanidad se produce a través de la palabra de Dios, los sacerdotes o pastores
ofrecemos nuestra vida para dar a conocer la palabra.
Los
levitas ayudaban a todas las personas a armonizar su vida y su trabajo con
la ley y los propósitos de Dios, hoy los sacerdotes y pastores tienen
esa misma función hacer que a través de la palabra de Dios las personas tengan
vidas armonizadas conforme a los planes de Dios.
El sacerdote
sacrifica su vida al servicio de la comunidad cristiana, renuncia a tener un
trabajo bien remunerado de acuerdo a la profesión que pueda tener o a vivir en
el mundo de los negocios de acuerdo a la habilidad que pueda tener.
Por lo
general el primogénito de toda familia es la esperanza del hogar para continuar
con los negocios y legados familiares, para que esos sueños y proyectos no se
vean entorpecidos Jehová deja al primogénito y toma al levita o sacerdote en su
lugar.
Por este motivo para el pueblo de Israel el
sacerdote era apreciado y valorado a tal grado que con alegría se encargaba de
su sostenimiento y cuidado. Números 18: 24 “Porque a los levitas he dado por heredad los
diezmos de los hijos de Israel, que ofrecerán a Jehová en ofrenda; por lo cual
les he dicho: Entre los hijos de Israel no poseerán heredad”