La mayoría de las personas decimos tener una Misión que cumplir aquí en la tierra, el problema es que muchos solo nos contentamos con decir eso, pero no hacemos nada por descubrir cual es nuestra Misión y sobre todo poco nos preocupamos por saber cómo es que la tenemos que ejecutar o hacerla Realidad. El Rey Salomón tenía la misión de construir el templo, pero no solo lo sabía, también hacia todo lo posible por cumplirla.
Todos los cristianos tenemos una
misión que cumplir a qui, en la tierra, al igual que todos los seres humanos,
pero además de esa misión personal también tenemos la misión de hacer realidad
el deseo que Jesucristo tiene en su corazón hacer que todo el mundo sea salvo.
1 Timoteo 2: 4 “el cual
quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad”
Para poder cumplir con esta Misión
no solo basta con que le compartamos a todas las personas sobre las maravillas
de Jesús, también es necesario que trabajemos sobre el lugar donde nos
reunimos.
Todo soldado que tiene una misión
también debe tener una guarnición o un lugar donde llegar a descansar y sobre
todo llegar a recargarse de energía, de fuerzas y a curar sus heridas si ese
fuera el caso.
Los cristianos y sobre todo quienes
le servimos a Jesucristo también corremos el riesgo de ser heridos, de que nos
cansemos y es necesario recargarnos de fuerzas para continuar con más fuerzas
nuestra misión.
El lugar donde recobramos fuerzas y
nos animamos y exhortamos mutuamente es en el Templo. Hebreos 10: 25 “no dejando de congregarnos, como algunos
tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel
día se acerca”
Como ayudar con el sostenimiento
del Templo.
1. Tomando la Determinación. 2 crónicas
2: 1 “Determinó, pues,
Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino” nada de
lo que anhelamos lo podemos conseguir si no tomamos la determinación de
hacerlo.
·
1.1. Solo cuando tomamos la determinación se abren
posibilidades y la bendición llega de manera sobrenatural.
2. Buscando la colaboración de
Todos. V 2 “Y
designó Salomón setenta mil hombres que llevasen cargas, y ochenta mil hombres
que cortasen en los montes, y tres mil quinientos que los vigilasen.” Cuando
nos disponemos todos podemos ayudar de diferentes maneras.
·
2.1. Entre todos los miembros de la congregación
podemos ayudar a mejorar y avanzar en todos los proyectos de evangelización.
3. Debemos estar seguros que es en
el templo donde le alabamos en unidad. V 4 “He aquí, yo tengo que edificar casa al nombre de
Jehová mi Dios, para consagrársela, para quemar incienso aromático delante de
él, y para la colocación continua de los panes de la proposición, y para
holocaustos a mañana y tarde, en los días de reposo, nuevas lunas, y
festividades de Jehová nuestro Dios; lo cual ha de ser perpetuo en Israel.” Solo si
sabemos la importancia de nuestra congregación podemos aportar con alegría.
4. Debemos ver el templo con la
misma importancia como vemos a Jesucristo. V 5 “Y la casa que tengo que edificar, ha
de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses” solo si
le damos la respectiva importancia al templo, podremos cuidarlo con todo
nuestro corazón.
5. Pidiéndole a Jesucristo que nos dé
dones y habilidades para poder ayudar. V 7 “Envíame, pues, ahora un hombre hábil que sepa
trabajar en oro, en plata, en bronce, en hierro, en púrpura, en grana y en
azul, y que sepa esculpir con los maestros que están conmigo en Judá y
Jerusalén, los cuales dispuso mi padre.” Si a Jesucristo
le pedimos lo mejor para nosotros, también debemos darle lo mejor a él.
6. Queriendo alcanzar lo mejor. V 9
“para que me preparen
mucha madera, porque la casa que tengo que edificar ha de ser grande y
portentosa.” solo cuando queremos lo mejor nos esforzamos, nos exigimos
y buscamos cada día mejorar.
7. Delegando responsabilidades de
Control. V 18 “Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta
mil canteros en la montaña, y tres mil seiscientos por capataces para hacer
trabajar al pueblo” entre más grande sea lo que queremos alcanzar más deben ser
las personas que nos ayuden a controlar.
Nuestra Misión no solo es
evangelizar y hacer que la humanidad conozca de Jesucristo, nuestra Misión
también es tener y cuidar un lugar apropiado donde podamos reunirnos para
agradecer y alabar a Jesucristo.