Cuando hablamos de Jesucristo con nosotros nos referimos a tener la presencia de Dios en cada una de nuestras actividades.
De nada sirve que logremos
cristalizar todos nuestros sueños, alcancemos grandes metas si en cada sueño,
en cada meta no llevamos la presencia de Dios.
De nada servía construir el mejor
templo para Dios si él no estaba en ese lugar, sería como hacer la mejor fiesta
de 15 años sin la quinceañera en la fiesta. por lo tanto, el siguiente paso a
seguir después de construir el templo era llevar la presencia de Dios a ese
lugar. V 4- 5 “Vinieron, pues, todos
los ancianos de Israel, y los Levitas tomaron el arca: Y llevaron el arca, y el
tabernáculo de reunión, y todos los utensilios del santuario que estaban en el
tabernáculo: los sacerdotes y los Levitas los llevaron.” En este
caso era un templo físico.
También es necesario llevar la
presencia de Dios a nuestra casa, nuestro hogar, a nuestros negocios y a todo
lo que hagamos.
Es la presencia de Dios en el
templo la que hace milagros. Es la presencia de Jesucristo en nuestra familia
la que la restaura y es la presencia de Jesucristo en nuestras finanzas que nos
da la verdadera prosperidad.
Como atraer la Presencia de Dios.
1. Estando en Unidad. la presencia
de Jesucristo se manifiesta cuando el pueblo se une para invocarlo. La promesa
de Jesucristo es que el descendería donde hay dos o tres reunidos en su nombre.
Mateo 18: 20 “Porque
donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de
ellos.”
Estar unánimes es mucho más que
estar juntos. Estar unánimes es tener un mismo sentir en lo que se desea pedir.
Mateo 18: 19 “Otra
vez os digo, que, si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca
de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los
cielos.” el problema es que muchas veces cuando nos reunimos en el
culto cada quien pide por su propia necesidad y no se pone de acuerdo con el
que está orando.
2. Con Adoración y Alabanza. V 12 “y los levitas
cantores, todos los de Asaf, los de Hemán, y los de Jedutún, juntamente con sus
hijos y sus hermanos, vestidos de lino fino, estaban con címbalos y salterios y
arpas al oriente del altar; y con ellos ciento veinte sacerdotes que tocaban
trompetas:)”
2.1. La
Adoración y la Alabanza atraen la presencia de Dios. V 13-14 “Cuando sonaban, pues,
las trompetas, y cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a Jehová: y a
medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de
música, y alababan a Jehová, diciendo: Porque él es bueno, porque su
misericordia es para siempre: entonces la casa se llenó de una nube, la casa de
Jehová. Y no podían los sacerdotes estar allí para ministrar, por causa de
la nube; porque la gloria de Jehová había llenado la casa de Dios.”
2.2. En
medio de la Adoración y la Alabanza es como Jesucristo hace milagros. Para
recibir un milagro no necesitamos gritar a Jesucristo, lo único que necesitamos
hacer es adorarlo con todo nuestro corazón. 2 crónicas 20: 22 “Y cuando comenzaron a
entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab, y
del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se
mataron los unos a los otros:”
Con los dones y talentos que
tenemos Jehová nos da el poder para hacer las riquezas, pero solo su presencia
es la que nos da verdadera prosperidad, podemos ser millonarios tenerlo todo en
cuanto a lo material y estar vacíos en nuestro corazón, la prosperidad nos hace
sentir plenos en cualquier situación que estemos pasando.