La mayoría de los seres humanos nos lamentamos, renegamos y hasta maldecimos la sociedad en la cual nos tocó vivir.
No todo
el mundo está dispuesto desacomodarse para darle vida a algo nuevo para esto se
necesita ser valiente.
Nehemías
ya había reconstruido Jerusalén, pero ahora era necesario habitarla, darle vida,
era necesario ahora reconstruir la sociedad, crear una nueva. Para esta misión de
manera voluntaria algunos varones se ofrecieron para ir. V 2 “Y bendijo el pueblo a todos los varones que
voluntariamente se ofrecieron para morar en Jerusalén.”
Nuestra naturaleza
es pecadora, el hacer el mal está en el corazón del hombre por eso nuestro mal
proceder. Romanos 3: 9 “¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En
ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están
bajo pecado.”
Ahora como
cristianos no solo somos salvos, también es nuestra obligación restaurar la
sociedad corrompida donde vivimos.
La palara
de Dios es la que nos instruye a nosotros y transformo nuestra vida. con ella
debemos ayudar a los demás. 2 Timoteo 3: 16 “Toda la
Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para
corregir, para instruir en justicia”
Para educar
a esta sociedad es necesario primero educarnos a nosotros mismos y a nuestra
familia ya que la sociedad no es mas que el reflejo de lo que somos las
familias.
Como nos
podemos educar para construir una Nueva Sociedad.
1. Haciendo
de la palabra de Dios nuestra forma de vida. Deuteronomio 6: 6-7 “Y estas palabras que yo
te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y las repetirás a tus
hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al
acostarte, y cuando te levantes.” No solo se trata de cuantas veces ya hemos leído la biblia,
sino de cuantas veces ya la hemos aplicado a nuestra vida.
- 1.1. Para la lectura de cualquier libro se vale
que hagamos cursos de lectura rápida, pero para la palabra de Dios es
necesario leerla detenidamente, con atención y mucha comprensión.
- 1.2. El pueblo de Dios se perdió no por falta de
milagros, el pueblo veía milagros todos los días, pero a pesar de eso se perdió.
Al pueblo de Dios no le falto milagros, le falto conocimiento. Oseas 4: 6 “Mi pueblo fue
destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el
conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu
Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.”
2. Haciendo
el bien a las personas que hacen parte de nuestro núcleo o con quien día a día
tratamos. Gálatas 6: 9 “No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo
segaremos, si no desmayamos” tarde o temprano las personas
aprender de nuestro actuar.
- 2.1. Debemos tratar a los demás como queremos que
ellos nos traten a nosotros. Mateo 7: 12 “Así que, todas las cosas que
queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con
ellos; porque esto es la ley y los profetas.”
3. Muchas
de las cosas que hacemos o nuestro comportamiento esta regulado por nuestra
forma de pensar. Es por esto que debemos sacar de nuestra mente pensamientos
que nos lleva a tener una vida arruinada. Filipenses 4: 8 “Por lo demás, hermanos,
todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo
amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de
alabanza, en esto pensad.”
Que la
sociedad cambie no depende de las autoridades terrenales, de los profesores o
de los demás miembros de la sociedad, que la sociedad cambie es una tarea que
nos corresponde a todos.