Así como cada día te tomas tu tiempo para ducharte y lavarte los dientes, debes destinar un momento para valorar lo que tienes. Piensa en todas las cosas que has logrado, en lo que tienes y en quien está a tu alrededor. Incluso el día más difícil o desagradable mejorará cuando aprendas a agradecer.
No esperes a perder las bendiciones de Jesucristo para empezar
a valorarlas.
No ejes que las muchas ocupaciones
o el desagradecimiento te hagan perder lo que tienes con Jesucristo. V 2 “¡Quién me volviese
como en los meses pasados, Como en los días en que Dios me guardaba,”
Que cosas podemos estar perdiendo.
1. Estar libres de Temores y
complejos. V 3 “Cuando hacía resplandecer sobre mi cabeza su
lámpara, A cuya luz yo caminaba en la oscuridad” la
oscuridad esconde temores, pero la luz de Cristo o el sentirnos acompañados nos
da Tranquilidad.
2. Sentir la compañía de Dios y de
nuestros seres queridos. V 5 “Cuando aún estaba conmigo el Omnipotente, Y mis hijos
alrededor de mí;” muchas personas están rodeadas de personas, pero igual se
sienten solas.
3. Sentirse Honrado y honrar a los
Demás. V 8-9 “Los
jóvenes me veían, y se escondían;
Y los ancianos se levantaban, y estaban de pie. Los príncipes detenían sus
palabras;
Ponían la mano sobre su boca.” El respeto hace que vivamos en paz y de manera
maravillosa.
4. Tener la capacidad de ayudar a
los Demás. V 12 “Porque yo libraba al pobre que clamaba, Y al huérfano
que carecía de ayudador.” Solo el ser útil para los demás
llena nuestro Corazón.
5. Transmitir consuelo y Esperanza.
V 13 “La bendición del que
se iba a perder venía sobre mí, Y al corazón de la viuda yo daba alegría.” El hacer
que otros se sientan bien hace que nuestra alma se sienta Bien.
6. Siendo Útiles para los Demás. V
15 “Yo era ojos al
ciego, Y pies al cojo.” La verdadera felicidad consiste en saber que otros
pueden contar con nosotros.
7. Ayudando a los Pobres o a
quienes no tienen quien los ayude. V 16 “A los menesterosos era padre, Y de la causa
que no entendía, me informaba con diligencia” El ayudar a los demás le da sentido
a nuestra vida.
8. No permitiendo que Hagan daño a
los Indefensos. V 17 “Y quebrantaba los colmillos del inicuo, Y de sus
dientes hacía soltar la presa.” Cuando cuidamos a los indefensos hace que otros
también cuiden de Nosotros.
9. Siendo Causa de Gozo para los
Demás. V 23-24 “Me esperaban como a la lluvia,
Y abrían su boca como a la lluvia tardía. Si me reía con ellos, no lo
creían; Y no abatían la luz de mi rostro.” Lo que nosotros hacemos
por otros siempre se devuelve hacia nosotros.
Estar con Jesucristo es maravilloso, muchas veces recibimos tantas bendiciones que nos acostumbramos a ellas y ya no las valoramos y corremos el riesgo de perderlas.