Salomón era un hombre que además de su trabajo como Rey realizaba muchas otras actividades que le impedían gozar de lo que él era. 2: 10 “No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena.”
Un adagio popular dice: “el que mucho abarca poco aprieta”
La ansiedad y la desesperación por conseguir lo que anhelaba hacia que no pudiera disfrutar lo que hacía. 2: 18 “Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí”
Salomón se dio cuenta que en realidad lo único que podía hacer es disfrutar del fruto de sus manos es decir disfrutar de su Trabajo. 3: 22 “Así, pues, he visto que no hay cosa mejor para el hombre que alegrarse en su trabajo, porque esta es su parte; porque ¿quién lo llevará para que vea lo que ha de ser después de él?”
El problema de nuestra sociedad actual es que cada día se quiere conseguir una gran cantidad de cosas pero en menos tiempo.
Cada vez consideramos que el tiempo es corto y que no alcanza para nada, cada día corremos más y entre más rápido corremos más rápido pasan las cosas y no tenemos tiempo para poderlas disfrutar.
Los hijos se crecen, las personas se envejecen y no hemos tenido tiempo para disfrutarlos, ¡Para! y piensa. Reflexiona sobre lo que es importante en tu vida.
Deja de correr para llegar más rápido a ningún lugar. Deja de amontonar posesiones y dinero, poder y satisfacción personal; deja de engañarte a ti mismo. Puede que creas que todos te admiran, pero tú sabes que realmente solo te engañas a ti mismo. Los que admiran ese tipo de vida muy pronto llegan a odiarla cuando se ven en la misma insatisfacción.
Como Disfrutar lo que Hacemos.
1. Disfruta el Presente sin condicionarlo. No esperes a ser feliz si logras lo que quieres porque eso puede tardarse un poco. No digas seré feliz cuando tenga una casa o cuando termine mis estudios. Etc.
2. Disfruta los Pequeños Detalles, no esperes a tenerlo todo para ser feliz. En las cosas pequeñas muchas veces hay más disfrute que en las grandes cosas.
Las grandes cosas se las consigue a través de las pequeñas cosas, paso a paso es como se llega lejos.
3. Sácale provecho a todas las situaciones de tu vida. El Apóstol Pablo dice que él puede vivir bien en lo mucho en lo poco. Filipenses 4: 12 “Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.”
4. Prioriza lo que estás haciendo. No pienses en varias cosas a la vez, no porque no se pueda, pensar en otras cosas en el momento en que estas haciendo algo te distrae y pierdes la oportunidad de disfrutarlo. No veas televisión pensando en que vas a almorzar, no almuerces pensando en cómo vas a pagar los servicios. Etc.
5. Disponte a Disfrutar lo que haces. Hoy ya no podemos decir que debemos trabajar o hacer lo que nos gusta o lo que amamos, cada día hay menos posibilidades de trabajo, estamos expuestos hacer cosas que no esperábamos, pero es necesario aprender a disfrutar lo que hacemos haya estado entre nuestros planes o no lo haya estado.
Aun en el área Espiritual es necesario concentrarnos en lo que estamos haciendo, a Jehová le encanta que nosotros lo podamos disfrutar. Salmos 37: 4 “Deléitate asimismo en Jehová,
Y él te concederá las peticiones de tu corazón.”
La única forma de conseguir ser feliz en esta vida es si aprendemos o nos disponemos a disfrutar lo que estamos haciendo, los años que tenemos o la situación que estamos pasando. La única forma de ser personas apasionadas es disfrutando lo que hacemos.