El problema del cristianismo moderno es que muchos creen que ser cristiano es tan solo congregarse en algún lugar a la espera de un milagro.
Otros consideran que ser cristiano es congregarse en algún lugar comprometido por el milagro que recibió, tanto que algunos consideran que si se dejan de congregar les vuelve a ir mal, y ese temor lo mantiene anclado en una silla de algún lugar llamado templo.
Ser cristiano es mucho más que tan solo eso que miramos.
Ser cristiano es convertirse en un Atalaya. Es decir un cristiano es alguien que toma la decisión de ser alguien que anuncia las verdades de Jesucristo. V 1-2 “Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: 2Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su territorio y lo pusiere por atalaya”
El deber de todo cristiano es llevar el mensaje de salvación a todas partes del mundo. Mateo 28: 19 “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo;”
El medio que Dios utiliza para llamarnos a ser parte de su gran ejercito de atalayas; puede ser un problema, una necesidad o el llamado que podemos sentir en nuestro corazón hay personas que han tomado la decisión de seguir a Jesucristo y nunca han tendido problemas o dificultades.
Porque no queremos ser Atalayas.
1. No queremos Asumir compromisos. V 6 “Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya.” si un cristiano sabe que alguien no está actuando de manera correcta es su deber advertir.
· 1.1. Si el atalaya no advierte y esa persona se pierde Jesucristo se lo demanda a él. V 7-8 “A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. 8Cuando yo dijere al impío: Impío, de cierto morirás; si tú no hablares para que se guarde el impío de su camino, el impío morirá por su pecado, pero su sangre yo la demandaré de tu mano” nuestro deber es anunciar la verdad si nos escuchan o no ya no es nuestra responsabilidad.
· 1.2. Si Advertimos y no nos escuchan la responsabilidad ya no es nuestra. V 9 “Y si tú avisares al impío de su camino para que se aparte de él, y él no se apartare de su camino, él morirá por su pecado, pero tú libraste tu vida.” muchas personas desisten de anunciar aburridos porque nadie le escucha.
El Apóstol Pablo lo tenía muy en claro. Hechos 20: 26-27 “Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos; 27porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.” el apóstol predicaba el evangelio convencido de que de esta manera era libre de toda responsabilidad.
2. Miedo a ser Rechazados. Gálatas 4: 16 “¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por deciros la verdad?” ser mensajero de Cristo tiene un precio que muchos no queremos pagar.
· 2.1. Hablamos lo que a la gente le gusta Oír. 2 Timoteo 4: 3-4 “Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábula” hablar lo que a la gente le gusta garantiza un lleno total del templo.
· 2.2. En lugar de llevar a la gente a la salvación muchos los llevan a la condenación. Mateo 23: 15 “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, le hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros.”
3. Pereza para estudiar la palabra. Tito 1: 9 “retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen” cada vez se levanta un pueblo cristiano sin conocimiento.
· 3.1. Cada vez el evangelio verdadero se distorsiona, cada quien predica de acuerdo a su manera y no a la manera de Cristo. Jeremías 23: 21-22 “No envié yo aquellos profetas, pero ellos corrían; yo no les hablé, mas ellos profetizaban. 22Pero si ellos hubieran estado en mi secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo, y lo habrían hecho volver de su mal camino, y de la maldad de sus obras.”
· 3.2. Inseguridad para Hablar. La falta de conocimiento hace que en lugar de influenciar terminemos siendo influenciados por el mundo.
Ser cristiano es mucho más que tan solo acostumbrarse a congregarse en algún lugar por necesidad de un milagro o por simple acomodamiento, muchos se congregan porque en ese lugar se sienten cómodos. Ser cristiano es tomar la determinación de convertirse en un mensajero de Cristo con la palabra y con el testimonio de vida.