Portarse bien no necesariamente tiene que ver con santidad, portarse bien también tiene que ver con hacer las cosas Bien.
Pecado significa, equivocarse o errar al blanco. Todos o la gran mayoría en algún momento de nuestra vida hemos deseado portarnos mal o no hacer las cosas tan ceñidos a las normas sociales, empresariales o familiares.
Algunos consideran que nada han ganado con portase bien, este era el caso de Job. 35: 3 “Porque dijiste: ¿Qué ventaja sacaré de ello? ¿O qué provecho tendré de no haber pecado?”
En este mundo tenemos dos opciones: hacer las cosas bien o hacer las cosas mal, las personas de éxito son aquellas que se esfuerzan por hacer las cosas bien, las personas de fracaso son aquellas que se resignaron hacer las cosas mal.
Debemos entender que el hacer las cosas bien o el hacer las cosas mal tiene algunas connotaciones importantes.
1. Hacer las cosas Bien: el hacer las cosas bien nos brinda dos posibilidades.
1.1. Que las cosas nos salgan Bien.
1.2. Que las cosas nos salgan mal.
2. Hacer las cosas mal. Solo nos brinda una posibilidad y es que las cosas saldrán mal, no tengo de dónde escoger.
Porque hacer las cosas Bien.
1. Cuando hacemos las cosas mal, los únicos afectados somos nosotros. V 6 “Si pecares, ¿qué habrás logrado contra él? Y si tus rebeliones se multiplicaren, ¿qué le harás tú?” Dios ni los demás pierden con las cosas malas que hacemos.
2. Nos sentimos Satisfechos. Cuando hacemos las cosas bien y las cosas nos salen bien podemos experimentar una alegría indescriptible.
3. Podemos avanzar y crecer. Solo haciendo las cosas bien podemos conocer lo que es la prosperidad y el éxito.
Como hacer las Cosas Bien.
1. Ama lo que haces. Si amamos lo que hacemos nos gozamos, las cosas nos quedan bien y lógicamente nunca nos desanimamos.
2. Capacítate. Si tú no sabes hacer bien lo que te has propuesto lógicamente te va a quedar mal. Las personas de éxito son aquellas que cada día están aprendiendo como mejorar lo que hacen.
3. Busca gente que hagan las cosas bien para poder imitarlos. Los demás se pueden convertir en nuestros motivadores tanto para hacer las cosas bien como hacer las cosas mal.
4. Has las cosas como si fueran para Dios o para Ti. el trabajo que hacemos va a quedar perfecto si lo hacemos pensando en nosotros mismo. Piensa por un momento eso que estás haciendo si alguien te lo da te gustaría, será que lo que hacemos si le agarrada a Dios. Colosenses 3: 23 “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres”
Portarse bien o hacer las cosas bien vale la pena, de lo que hagamos es de lo que recibiremos, cada persona vive de las consecuencias de sus actos, si hacemos las cosas bien los resultados serán buenos.
