Los voceros (o portavoces) son mensajeros, su labor radica en comunicar adecuadamente los mensajes que una organización o persona busca posicionar entre sus audiencias. ... Dicho vínculo es, junto con mensajes definidos y bien estructurados, la clave para que exista una comunicación exitosa entre organización y público. En este caso ser un vocero de Cristo significa ser su boca aquí en la tierra. Jeremías 15: 19 “Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos”
Que se necesita para ser un vocero de Cristo.
1. Convertirse
a Cristo. V 19 a “Por
tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres,” un siervo
de Cristo trata por todos los medios de parecerse a él.
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1.1. Dios es Amor, pero también es
un padre. Jehová siempre está dispuesto a perdonarnos y darnos otra
oportunidad, pero también siempre está dispuesto a corregirnos cuando fallamos.
2. Dejarse
Restaurar. V 19 b “yo te
restauraré” es Jesucristo quien se encarga de hacernos nuevos.
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2.1. Un vocero de Cristo es
testimonio vivo de lo que Jesucristo puede hacer en una persona.
3. Estar
siempre en la Presencia de Dios. V 19 c “y delante de mí estarás;”
la única forma de permanecer siempre en la presencia de Jesucristo es a través
de la oración y del estudio de su Palabra.
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3.1. Para poder ser el vocero de
alguien se necesita conocerlo muy bien, de lo contrario sería muy difícil
hablar sobre él.
4. Dar lo
mejor de Sí. V 19 d “si
entresacares lo precioso de lo vil,” un vocero de Cristo se
caracteriza por su cumplimiento y diligencia en lo que hace.
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4.1. Para dar lo mejor de cada uno
de nosotros es necesario aceptar nuestros errores y esforzarnos por corregir.
5. No
dejarse influenciar por el mundo y sus costumbres. V 19 e “Conviértanse ellos a ti, y tú no
te conviertas a ellos”
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5.1. No comunica la palabra de Dios
a medias. V 2 “Así ha dicho Jehová:
Ponte en el atrio de la casa de Jehová, y habla a todas las ciudades de Judá,
que vienen para adorar en la casa de Jehová, todas las palabras que yo te mandé
hablarles; no retengas palabra.”
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5.2. Muchos siervos de Dios por
ganar gente para su congregación prefieren no decir todo lo que le manda Cristo.
2 Timoteo 4: 3 “Porque vendrá tiempo
cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que, teniendo comezón de oír, se
amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias”
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5.3. Un vocero de Dios no tiene miedo de confrontar a quienes
viven en pecado. V 13 “Mejorad ahora vuestros
caminos y vuestras obras, y oíd la voz de Jehová vuestro Dios, y se arrepentirá
Jehová del mal que ha hablado contra vosotros”
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5.4. Predica la verdad no importa
las consecuencias. V 8 “Y cuando terminó de
hablar Jeremías todo lo que Jehová le había mandado que hablase a todo el
pueblo, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano,
diciendo: De cierto morirás.”
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5.5. Muchos siervos de Dios
prefieren agradar a la gente antes que a Dios. Gálatas 1: 10 “Pues,
¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los
hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.”
Ser un vocero
de Cristo es mucho más que tan solo hablar de él, ser vocero de Cristo es dejar
que Jesucristo hable a través de nosotros, con nuestros labios, pero también a
través de nuestros actos o comportamiento.
