La única forma de prosperar y multiplicar lo que hacemos es si trabajamos en equipo.
El
matrimonio no solo tiene como propósito acompañarnos por siempre.
El
propósito de esta unión es que hagamos mejor lo que tenemos que hacer aquí en
la tierra.
La razón
por la cual muchas parejas fallan es porque solo piensan en el amor pasional,
el amor pasional va ligado a la hermosura del cuerpo la cual con el pasar de
los años se va acabando.
Las parejas
que se mantienen unidas por siempre son aquellas que tienen un propósito que
los une, los propósitos son más fuertes que el amor pasional.
Jesucristo
en ningún momento está de acuerdo con la separación de las parejas, pero lo
permite por la dureza del corazón del hombre.
V 4-5 “Ellos dijeron: Moisés permitió dar carta de divorcio, y repudiarla. Y
respondiendo Jesús, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este
mandamiento;”
Como mantenernos unidos hasta el final.
1. No
dejando que terceras personas se involucren en nuestra relación. V 7 “Por esto dejará el
hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer,” a medida
que tus condiciones económicas te lo permitan debes procurar no vivir en casa
de ninguno de los padres o familiares.
·
1.1. No permitiendo que la intromisión
de los demás, ni las circunstancias difíciles nos separen. V 8-9 “y los
dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino uno. 9 Por
tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.”
2.
Soportándonos los unos a los otros. Colosenses 3: 13 “soportándoos unos a otros, y
perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que
Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.” cuando
solo es uno el que soporta por lo general se cansa y toda la estructura del
hogar tiende a desplomarse.
3. Teniendo
sentido de pertenencia el uno con el otro. Génesis 2: 23 “Dijo entonces Adán:
Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada
Varona, porque del varón fue tomada.”
esto nos significa que debemos ser posesivos. Esto significa que debemos cuidar
al otro como algo nuestro.
4.
Invirtiendo tiempo en la relación. Génesis 29: 20 “Así sirvió Jacob por Raquel siete
años; y le parecieron como pocos días, porque la amaba.” todo el
tiempo que podamos dedicarle a nuestra relación de pareja no es perdida es
inversión por lo tanto genera ganancia.
5.
Cumpliendo con los deberes conyugales. 1 Corintios 7: 5 “No os neguéis el uno
al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos
sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente
Satanás a causa de vuestra incontinencia.”
si el hombre o la mujer se siente satisfecha con su pareja va a tener menos
peligro de caer en tentación.
6. No
dejando que se acabe el amor romántico. El Romanticismo oxigena la relación y
evita que se marchite. Amor eros. Cantar de los cantares 7: 6-9 “¡Qué hermosa eres, y
cuán suave, Oh amor deleitoso! u estatura es semejante a la palmera, Y tus
pechos a los racimos.” el amor
fraternal también es importante en la pareja es el que nos permite soportarnos
y ayudarnos del uno al otro.
7.
Agradándose del uno al otro. 1 Corintios 7: 34 “Hay asimismo diferencia entre la
casada y la doncella. La doncella tiene cuidado de las cosas del Señor, para
ser santa así en cuerpo como en espíritu; pero la casada tiene cuidado de las
cosas del mundo, de cómo agradar a su marido.”
una persona detallista siempre tiene más oportunidad de conquistar el corazón
de su amada. Un hombre o una mujer no necesita que se le den detalles costosos
tan solo una palabra a tiempo puede ser suficiente. Un estas bonita(o) que bien
que te queda el peinado. Etc. Pueden ser más que suficiente.
8.
Exprésense el amor que se sienten. Cantares 1: 15-16 “He aquí que tú eres hermosa, amiga
mía; He aquí eres bella; tus ojos son como palomas. He aquí que tú eres
hermoso, amado mío, y dulce; Nuestro lecho es de flores.”
de manera particular las mujeres siempre se quejan que sus esposos no son
expresivos para comunicar su amor. Ellas nos preguntan si las amamos y nosotros
solo decimos aja, o usted sabe que sí. Nuestras esposas o esposos saben que los
amamos o las amamos, pero ellos necesitan escucharlo de nuestros labios.