Jesús entrego de manera voluntaria su vida en la Cruz, la razón por la cual lo hizo ya lo sabemos él lo hizo porque tiene un deseo en su corazón, el deseo que él tiene es que todo el mundo sea salvo a través del conocimiento de su palabra. 1 Timoteo 2: 4 “el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al pleno conocimiento de la verdad.” Solo el conocimiento del padre es lo que nos genera vida eterna. Juan 17: 3 “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado”
Jesucristo murió
para darnos Salvación y vida eterna. Han pasado muchos años y más del 80 por ciento
de la humanidad todavía no tiene el conocimiento de Jesucristo, ¿Qué paso? ¿No
sirvió el sacrificio de Jesús?
Por
supuesto que no, el sacrificio fue perfecto, Jesús hizo su parte, el problema
es que, por diferentes intereses personales, muchos siervos entendieron que su única
misión era llenar templos con gente y no llenar el mundo con la palabra.
Muchas personas
predican la palabra, no porque Jesucristo los haya llamado, lo hacen porque
confunden llamado con necesidad económica. Filipenses 1: 15 “Algunos, a la verdad, predican a
Cristo por envidia y contienda; pero otros de buena voluntad”
Por esta razón
todos los esfuerzos y todas las estrategias van enfocadas en cómo atraer gente
para el templo y muy poco se invierte en dar a conocer a la palabra de Jesucristo
a todo el mundo congréguese con nosotros o no lo hagan.
Características del llamado de Dios.
1. Dios no
mira lo que hacemos en el momento, él mira lo que podríamos llegar hacer con él.
V 1-4 “Saulo,
respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo
sacerdote, y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que, si
hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a
Jerusalén.” No es solo la santidad lo
que determina nuestro llamado, Jesucristo también mira nuestra determinación y
nuestra capacidad para poder servir en la obra.
·
1.1. Pablo tenía unas características
especiales que posiblemente ninguno de los discípulos la tenían por eso a pesar
de su forma de ser fue llamado. ya de restaurarlo se encargaría Jesús.
2. Dios
utiliza cualquier circunstancia para llamarnos. V 8 “Entonces Saulo se levantó de tierra,
y abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole por la mano, le
metieron en Damasco,” un
momento de alegría, un momento de dificultad o cual quiera otra situación que
estemos pasando Jesucristo lo puede utilizar para llamarnos.
3. Dios no
escucha acusaciones en nuestra contra. V
13-14 “Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este
hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén; y aun aquí tiene
autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu
nombre.” Muchas personas se pueden oponer a nuestro llamado al
servicio.
·
3.1. Jesús no mira lo que éramos, él
mira lo que podríamos llegar ser si nos dejamos guiar por el.
4. Dios nos
convierte en sus instrumentos útiles. V 15 “El Señor le dijo: Ve, porque
instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los
gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel;” Jesucristo
no escoge personas con muchas habilidades, él nos da las habilidades cuando nos
escoge.
·
4.1. Si alguien te recuerda lo que
eras antes del llamado, respóndele que tú eras un inservible, el posiblemente
sigue siendo.
5. Jesucristo
nos restaura ara que le podamos servir de manera diligente. V 18 “Y al momento le cayeron
de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue
bautizado.”
6. Jesús
nos da de su santo espíritu. V 17 “Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo
sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en
el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas
lleno del Espíritu Santo.”
Qué hacer cuando somos Llamados.
1. Ponte a
sus órdenes. Pregúntale que quieres que hagas. V 6 “El, temblando y temeroso, dijo:
Señor, ¿qué quieres que yo haga? Y el Señor le dijo: Levántate y entra en la ciudad,
y se te dirá lo que debes hacer.” No te lamentes por lo que te está
pasando pregúntate que espera Jesús que tu hagas.
2. Sírvele
a Jesús de manera inmediata, no pospongas lo que tienes que hacer. V 20 “En seguida predicaba a
Cristo en las sinagogas, diciendo que éste era el Hijo de Dios.” no vivas de las excusas.
3.
Esfuérzate por servir cada vez más cuando te critiquen. V 21-22 “Y todos los que le
oían estaban atónitos, y decían: ¿No es éste el que asolaba en Jerusalén a los
que invocaban este nombre, y a eso vino acá, para llevarlos presos ante los
principales sacerdotes? Pero Saulo mucho más se esforzaba, y confundía a los
judíos que moraban en Damasco, demostrando que Jesús era el Cristo.”
4. No te
incomodes por el rechazo de los demás. V 26 “Cuando llegó a Jerusalén, trataba de
juntarse con los discípulos; pero todos le tenían miedo, no creyendo que fuese
discípulo.” todos los que te conocían
tardan un poco en aceptarte como alguien nuevo. Es normal que por algún tiempo
te recuerden como eras antes.
Si Dios te
Llamo no trates de evadirlo porque no importa dónde te ocultes o cuanto te
demores en escucharlo el llamado te alcanzara. No esperes a vivir situaciones
difíciles para acercarte a Jesucristo.