Todos los seres humanos tenemos un pasado algo que hicimos o que dejamos de hacer, para algunos ese pasado es maravilloso tan maravilloso que no lo quieren dejar y por esta razón se estancan y no avanzan. Para otros el pasado fue deprimente tanto que el miedo a volver a vivirlo los paraliza y prefieren quedarse donde están y no avanzar.
Cualquiera que haya sido nuestro pasado
debemos aprender de él, si nuestro pasado fue maravilloso debemos mejorar lo
que hicimos para tener un excelente presente y un magnifico futuro.
Si nuestro pasado fue difícil debemos
corregir lo malo que hicimos para poder mejorar en el presente y ser mucho
mejor en el futuro.
No mirar hacia atrás no significa
no darle una mirada, no mirar hacia atrás significa no quedarnos en ese pasado,
no añorarlo de tal manera que nos detenga en nuestro largo camino por la vida.
El desear el pasado con tanta
vehemencia nos impide disfrutar lo que tenemos en el presente, nuestro
comportamiento no es el mejor por lo tanto nos dañamos a nosotros mismos y
dañamos a quienes están con nosotros.
El tenerle tanto miedo al pasado
hace que perdamos nuestra autoconfianza y que actuemos de manera insegura.
La inseguridad en nuestro actuar es
lo que hace que las cosas no salgan como lo esperábamos. El miedo a volver a
fracasar nos impide innovar o darnos otra oportunidad.
Dio le advirtió a Lot que no
miraran hacia atrás. Génesis 19: 17 “Y
cuando los hubieron llevado fuera, dijeron: Escapa por tu vida; no mires tras
ti, ni pares en toda esta llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.”
Lastimosamente la esposa de Lot
hizo caso omiso a esta advertencia y se hizo estatua, perdió la capacidad de
seguir avanzando. V 26 “Entonces
la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal.”
Hoy en día hay mucha gente estatua
ya no avanza se ha resignado a lo que es y a lo que tiene. Por eso aun en
nuestros tiempos la advertencia de no quedarnos en el pasado, de no volver
nuestra mirada hacia atrás sigue vigente. Lucas 17: 32 “Acordaos
de la mujer de Lot.”
Porque nos detenemos en el pasado.
1. Miedo a lo desconocido o lo
nuevo. Jehová es un Dios que todos los días está innovando, él es un creador
por esta razón el promete enseñarnos cada día algo nuevo, algo que no
conocemos. Jeremías 33: 3 “Clama
a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no
conoces”
· 1.1. Las
personas que se resignan a estar en su zona de confort, están condenadas al
estancamiento, emocional, espiritual y material.
2. Pereza para prepararnos o
capacitarnos de manera constante. Las personas de éxito no se cansan de aprender
todos los días, las personas de fracaso creen que ya todo lo saben y con eso se
mantienen.
· 3.1. Las
personas sabiondas son aquellas que consideran que ya no tienen nada más que
aprender. Las personas de éxito siempre tienen un espíritu de aprendiz.
Son muchas las razones por las
cuales nos mantenemos en el pasado y preferimos no avanzar, nunca te detengas,
nunca dejes de aprender, solo avanzando llegamos a donde queremos y alcanzamos
nuestros Propósitos.