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1 Samuel 25. Actitud para Triunfar

 

Todos en el mundo deseamos tener vidas de éxito, pero tan solo unos pocos lo consiguen, la verdad es que la razón para muchos no conseguir el éxito es porque piensan que para lograrlo es necesario tener mucho dinero.

El dinero no siempre es garantía de éxito, lo que en verdad determina lograr el éxito o el fracaso es la actitud de cada persona.

Una buena actitud hace que todos nos amen, una mala actitud hace que todos nos odien.

En este capítulo 25 vamos a ver la historia de dos personas totalmente diferentes la una de la otra. Una con buena actitud y otra con muy mala actitud.

Cosas que generan una mala Actitud.

1. Ser Desagradecido. V 10 a “Y Nabal respondió a los jóvenes enviados por David, y dijo: ¿Quién es David, y quién es el hijo de Isaí?” El desagradecimiento hace que no valoremos el trabajo de los demás.

2. No tener respeto ni honra por nadie. V 10 b “Muchos siervos hay hoy que huyen de sus señores.” Las personas que desprecian a los demás viven en amargura.

3. Ser Egoísta. V 11 ¿He de tomar yo ahora mi pan, mi agua, y la carne que he preparado para mis esquiladores, y darla a hombres que no sé de dónde son?” todo cree que es de él lo que más detesta es compartir. Quiere que todos le hagan favores, pero se molesta a la hora de hacerlos.

4. Confiar demasiado en sus riquezas. V 2 “Y en Maón había un hombre que tenía su hacienda en Carmel, el cual era muy rico, y tenía tres mil ovejas y mil cabras. Y aconteció que estaba esquilando sus ovejas en Carmel.” El confiar solo en nuestras habilidades hace que no aceptemos ayuda de los demás.

5. Dejar que su linaje lo Enceguezca. V 3 b “y era del linaje de Caleb.No importa de qué familia descendamos siempre debemos ser humildes, recuerda que en Cristo todos somos iguales.

6. Ser Insensato. V 25 “No haga caso ahora mi señor de ese hombre perverso, de Nabal; porque conforme a su nombre, así es. Él se llama Nabal, y la insensatez está con él; mas yo tu sierva no vi a los jóvenes que tú enviaste.” Toda persona insensata no sabe de educación.

Consecuencias de una mala actitud.

1. Genera mala comunicación con los demás. V 17 b “Ahora, pues, reflexiona y ve lo que has de hacer, porque el mal está ya resuelto contra nuestro amo y contra toda su casa; pues él es un hombre tan perverso, que no hay quien pueda hablarle.” El no escuchar a los demás hace que tomemos malas decisiones.

2. Causa su destrucción y la de los demás. V 34 “Porque vive Jehová Dios de Israel que me ha defendido de hacerte mal, que, si no te hubieras dado prisa en venir a mi encuentro, de aquí a mañana no le hubiera quedado con vida a Nabal ni un varón.” En este mundo para poder avanzar necesitamos la ayuda de los demás.

Consecuencias de una Buena Actitud.

1. Genera Confianza. V 14 “Pero uno de los criados dio aviso a Abigail mujer de Nabal, diciendo: He aquí David envió mensajeros del desierto que saludasen a nuestro amo, y él los ha zaherido.” Una buena actitud atrae a las demás personas, nadie quiere estar con un amargado, todos quieren estar con alguien alegre y de buena actitud.

2. Aplaca el enojo de los Demás. V 33 “Y bendito sea tu razonamiento, y bendita tú, que me has estorbado hoy de ir a derramar sangre, y a vengarme por mi propia mano.” Una buena actitud genera buena convivencia en el entorno donde vivimos.

3. Encuentra Gracia delante de los Demás. V 35 “Y recibió David de su mano lo que le había traído, y le dijo: Sube en paz a tu casa, y mira que he oído tu voz, y te he tenido respeto.” Nuestra actitud es la base para lograr buenas o malas relaciones con los demás.

4. Nos sube de Nivel. V 40-41 “Y los siervos de David vinieron a Abigail en Carmel, y hablaron con ella, diciendo: David nos ha enviado a ti, para tomarte por su mujer. Y ella se levantó e inclinó su rostro a tierra, diciendo: He aquí tu sierva, que será una sierva para lavar los pies de los siervos de mi señor.” Una buena actitud nos hace ver importantes.

Una buena actitud hace que se habrá puertas de oportunidad, una mala actitud hace que se cierren. Por nuestra actitud nos pueden amar o nos pueden despreciar. No dejes que los problemas o los triunfos dañen tu actitud.